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ERC, ICV-EUiA y CUP-AE piden a la Fiscalía reabrir el caso de los 11 del Raval
El diputado David Companyon, ICV-EUiA, pide perdón a las víctimas del montaje policial y a la comunidad paquistaní de Barcelona.
Jesús Rodríguez // Ayub celebró hace poco su 70 aniversario. Esta mañana ha pisado por primera vez los pasillos del Parlament de Cataluña. Estaba sorprendido y agradecido por haber podido estar presente en la rueda de prensa convocada por el diputado David Fernández (CUP-AE), con el apoyo de los diputados David Companyon (ICV-EUiA) y Oriol Amorós (ERC). Este anciano afable y educado iba vestido con una larga túnica y acompañado de Abdelrrahim, miembro de la comuindad paquistaní del barrio del Raval de Barcelona.
Hace siete años, Ayub vio cómo su vida quedaba truncada por una pesadilla policial y judicial. Pese a ser un hombre muy estimado y conocido en el barrio, y regentar la pastelería paquistaní de la calle Hospital, Ayub fue esposado, trasladado hasta la Audiencia Nacional y posteriormente encerrado en prisión junto a otras diez personas. Los jueces Ismael Moreno y Javier Gómez Bermúdez fundamentaron su decisión en las palabras de un testigo protegido del cual nunca se supo la identidad. Ahora, gracias a una investigación periodística financiada por la fundación www.journalismfund.eu ha transcendido que el dedo acusador en este caso –el testigo protegido F1– mintió.
La comparecencia se ha hecho en la sala de prensa del Parlament, conocida como la sala del faristol. Ha tomado la palabra en primer lugar el abogado Benet Salellas, que desde el 20 de enero de 2008 –al día siguiente de las detenciones– defendió la inocencia de los detenidos.»Debería ser la Fiscalía quien abriese de oficio un procedimiento penal contra F1, lo citase a declarar como imputado y lo condenase por falso testimonio. Eso abriría la purta a la revisión del caso en el Tribunal Supremo», ha sentenciado Salellas. «Si no es así lo que no haremos es quedarnos de brazos cruzados, instaremos a las autoridades judiciales europeas para que fuercen una revisión del caso», ha dicho a continuación. También ha hecho refeencia a la responsabilidad que tuvieron en todo el procedimiento el ministro del Interior español Alfredo Pérez Rubalcaba y otros cargos políticos.Muy probablemente hacía referencia directa al papel que jugó el entonces consejero de Interior Joan Saura, que en relación al caso textualmente dijo: «Mejor por exceso que por defecto». Cuando llegó el turno de palabra de ldiputado de ICV-EUiA, David Companyon, muy consciente del papel que jugó Saura en aquell episodio ha manifestado mirando a los ojos de Ayud: «Quiero pedirle perdón por su sufrimiento, también quiero pedir perdón a la comunidad paquistaní», en un claro acto de molt conscient del paper que va jugar Saura en aquell episodi, ha manifestat mirant als ulls de l’Ayub: “Vull demanar-vos perdó pel vostre patiment, també vull demanar perdó a la comunitat pakistanesa», en un clar acte de constricción.
Puesta en libertad de Maroof Ahmed Mirza
David Fernàndez quien definió el caso como “nuestro Guantànamo particular”,ha agradecido el papel fiscalizador que tuvieron medios como Vilaweb, The Guardian o la Directa y y ha exigidoque haya una revisión judicial del caso, la reparación a las víctimas y garantías de que no vuelva a pasar. Por último, el diputado Oriol Amorós, en nombre de ERC, ha alertado que «en nombre de la defensa de los derecgos y las libertades no se pueden pisar los derechos y las libertades». Una vez acabada la comparecencia, Ayub y Abdelrrahim han visitado diversas dependencias de la cámara, acompañados por David Companyon, en un claro acto de desagravio hacia ellos. «Mira, esta foto es de Lluis Companys, presidente de la Generalitat que fue detenido por los nazis», decía Companyon mientras Ayub asentía con la cabeza. Mientras tanto, un periodista de un conocido portal digital de actualidad política preguntaba: «¿este eel testigo protegido F1?», en una clara muestra del desconocimiento del caso por parte de la prensa de aquí.
El diputado David Fernández, cuando se despedía de Ayub a las puertas del hemiciclo ha expresado la convicción de que el Gobierno catalán debería ordenar la puesta en libertad –en aplicación del tercer grado penitenciario– de Maroof Ahmed Mirza, el último de los once presos que todavía está en la carcel de Brians. Por su parte, el conseller de Interior Jordi Jané, ha reconocido que «se podría reabrir el caso si se demuestra que el testigo clave es falso».
Acto de homenaje en la rambla del Raval
por la tarde se ha celebrado un acto de homenaje a las víctimas del caso 11 del Raval. Dos pancartas, una mesa y cuatro sillas han servido de escenario improvisado en mitad de la rambla del Raval. Convocado por la Asamblea de Barrio del Raval y la campaña Justicia Juan Andrés ha acogido a más de 200 personas. En primer lugar ha hablado el profesor de antropología Alberto López Bargados, quien ha hecho referencia a Maroof, el único de los once procesados que todavía está en la prisión. «Qué imagen de nuestra democracia deben tener las tres hijas de este hombre, que vieron como lo detenían cuando tenían seis o siete años, y ahora en plena adolescencia verán cómo sale de la prisión», se ha preguntado Bargados algo emocionado por las cicunstancias que estamos viviendo en relación al caso. Presentaba el acto Miquel, un periodista de la revista Masala que desde el primer día de los hechos denunció muchas irregularidades y falsedades. El diputado David Fernández ha apelado a la conciencia de los periodistas diciendo que también tienen su parte de responsabilidad en el montaje. La cita también ha servido para que otras vícimas de montajes policiales o de casos de brutalidad cogiesen el micrófono y se dirigiesen a las personas allí presentes. Mohamed Ayub, el pastelero de la calle Hospital, encarcelado seis años, se ha sentado en la mesa y con mucha serenidad ha recibido las palabras de ánimpo de algunos miembros de la comunidad paquistaní que se han dirigido a la rambla.
[Artículo publicado originalmente en La Directa]