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Aguirre acusa a Carmena de querer acabar con la “democracia tal y como la conocemos”
La presidenta del PP madrileño acusa a Ahora Madrid de ser una formación "que quiere romper el sistema democrático"
MADRID // La presidenta del Partido Popular en la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha llamado a un gran pacto con el PSOE y Ciudadanos para evitar que Manuela Carmena de Ahora Madrid ocupe la alcaldía de la capital. Calificó a la plataforma ciudadana, que fue la segunda fuerza más votada en las elecciones municipales del domingo, de «opción radical» que a su juicio «quiere romper el sistema democrático occidental tal y como lo conocemos». «Por eso invito a los socialistas y a Ciudadanos para analizar en común la situación actual», ha afirmado Aguirre.
La presidente del PP de Madrid calificó de «malos» los resultados de las elecciones del pasado domingo en la ciudad de Madrid tras perder 193.000 votantes. Algo que ha calificado de «acicate» para un proceso de «opción reformista y conservadora».
Respecto al resultado global ha recordado que un millón de madrileños han votado a las distintas opciones que se han presentando desde el centro. Ahí coloca al «centro izquierda», representado por el PSOE, «que tan fundamentales han sido para la estabilidad», junto al «centro derecha» del propio PP y el «centro centro» representado por Ciudadanos.
En cambio ha situado a Manuela Carmena y a Ahora Madrid fuera de la Constitución. Asimismo criticó que Podemos «va a utilizar el Ayuntamiento de Madrid para ser primera fuerza política en las elecciones generales» y recordó que «no es tan raro que PP y PSOE lleguen a un pacto».
La líder del Partido Popular ha recordado que ella volvió a la política «para evitar un gobierno de Podemos» y ha ofrecido su propia cabeza si con ello se consiguiese un acuerdo que evitase que Carmena fuese la siguiente alcaldesa. «Si yo soy el problema, no hay problema», ha concluido.
La respuesta de Antonio Miguel Carmona, candidato del PSOE-PSM, a la mano tendida de Aguirre no se ha hecho esperar. A través de Twitter ha afirmado lo siguiente: «A la propuesta Aguirre recibir sus votos, Ciudadanos o el PSOE, mi respuesta, en el nombre del PSOE y en el mío propio, fue un NO rotundo».
Manuela Carmena, por su parte, también ha contestado a la líder conservadora a través de las redes sociales: «Sólo he estado fuera del sistema democrático cuando aún no lo había y estaba luchando por él. Seamos serios, por favor, Madrid lo necesita».
Aguirre y Aznar, superan mil veces a las peores alimañas de su partido.
Qué triunfo y que paz para este país si se consigue dejarlos definitivamente enterrados en el pasado de la historia.
¿cómo puedes tener tanta desvergüenza? cuando los que llevan décadas chupando del bote y destruyendo esta minidemocracia son los mafiosos corruptos del PP. ¿Qué pasa que se te acaba el chollo de delincuente sinvergüenza y m
La condesa no está en posición de dar lecciones de democracia a nadie, y mucho menos a la señora Carmena. Mientras la jueza luchaba porque en este mísero país hubiera democracia, seguramente la condesa se iba a los toros con la flor y nata del franquismo.
Pues si esto que tenemos hasta ahora es la democracia, sí, hace falta un revulsivo que la convierta en algo más participativo. Espero que Esperanza tenga razón y que Carmena sea ese revulsivo que nos traiga una democracia nueva.
Algo hemos hecho mal, pero que muy mal en esta democracia cuando Esperanza Aguirre, la jubilada tonta del bote, porque según ella no se enteró de nada de lo que hacían todos y cada uno de los consejeros, alcaldes y asesores que han asolado las tierras madrileñas con sus estafas, corruptelas y chanchullos, sigue erre que erre con sus nauseabundos manejos políticos. Pero por supuesto esto es España y todo es posible. http://diario-de-un-ateo.blogspot.com.es/2015/05/elecciones-spain-is-different.html
No he escuchado mucho a Carmena, pero en general me parece muy resptuosa y sensata. No comparto alguna cosa pero si la generalidad de lo que dice.
Esperanza Aguirre debería tener un poquito de dignidad y respeto, a los oponentes políticos y a los ciudadanos.