OTRAS NOTICIAS | Otros
Un país sin memoria: La Marea 26 centra su dossier en los desaparecidos por el franquismo
A la aversión tradicional del centroderecha a restaurar la dignidad de las víctimas republicanas, lamentablemente hay que sumarle una evidente falta de interés por parte de muchos municipios gobernados por partidos que se autodefinen de izquierdas.
El dossier del número de abril de la revista La Marea analiza la situación de la Memoria Histórica en España. Cuarenta años después de la muerte del dictador Francisco Franco, continúa el drama humano de cada una de las historias de las 130.000 personas desaparecidas durante la Guerra Civil y la dictadura. Por eso les dedicamos nuestra portada de abril. A la aversión tradicional del centroderecha a restaurar la dignidad de las víctimas republicanas, lamentablemente hay que sumarle una evidente falta de interés por parte de muchos municipios gobernados por partidos que se autodefinen de izquierdas.
El periódico mensual incluye un reportaje sobre la guerra del agua en Latinoamérica y la situación en Ucrania. También se abordan temas como el boom del uso de la bicicleta como solución a los problemas de movilidad de las ciudades, una infografía sobre la situación de la Educación en Europa, el negocio de la empresa privada Barnaclínic a costa de los recursos de la Sanidad pública catalana, el debate sobre una posible banca pública en España y un reportaje sobre artistas palestinos.
En cuanto a las colaboraciones habituales, Isaac Rosa se mete en la piel de los antidistubios en su relato #Vamosapararestedesahucio. Continúan las secciones de Javier Gallego, quien pasa una noche en el Patio Maravillas de Madrid, Eduardo Garzón, Eva Belmonte, Nuria Varela, Gerardo Tecé, Bob Pop y Antonio Baños. El autor de la portada es el diseñador Joseba Elorza.
Puedes comprar el nuevo número desde el viernes 27 de marzo en los quioscos y en nuestra tienda online.
Mil gracias a la Marea por dedicar el dossier a La Memoria Histórica. Es tan de Justicia cómo necesario para partir hacia un futuro mejor con los «cimientos» saneados y desde la Verdad.
La historia la escriben los vencedores y seguimos sometidos a los herederos de aquella criminal dictadura. Se les ha votado, es cierto, pero precisamente porque la gente no conoce la terrible historia real, conoce la historia tergiversada y la ocultación, que persiste hasta el día de hoy.
Si vamos a escribir aquí, vamos a hacerlo en serio. Empezar de nuevo con la cantilena de ‘hay que recordar lo que hicieron ambas partes’ vamos por mal camino. Parece que hay quien no se acaba de enterar de que la memoria que se reclama es la que NUNCA se ha contado. Es indignante que quienes comentan aquí con ese espíritu de ‘equidistancia’ no sepan o no quieran saber que durante los cuarenta años de franquismo se escribieron libros, se hicieron películas, se enseñó -a mí, por ejemplo- a los niños las maldades de la República y los republicanos, se hicieron obras de teatro sobe ese asunto. Jamás se permitió hablar a los derrotados. Sólo a los vencidos. Y por no hacer eterno este debate, les recuerdo a los iluminados de la ‘reconciliación’ que, siendo yo niño, descubrí en mi casa un libro que se llamaba la ‘Causa General’ contra los derrotados, libro que no parecen haber leído muchos de los que aquí y en otros sitios actúan de neutrales y angélicos cronistas del golpe de estado, que no guerra civil. En aquel libro se relataba pormenorizadamente los crímenes de los republicanos. Se incluían fotos espeluznantes de los cadáveres de los asesinados, con relatos terribles sobre las circunstancias en que habían ocurrido los crímenes. Se hacía un recuento exhaustivo de todas las barbaridades del bando republicano. Bueno, pues dejando de lado, que es mucho dejar, quién inició aquel golpe y quiénes lo financiaron y por qué, quiero dejar claro que la parte de horror del bando republicano quedó grabada, con las inexactitudes y las exageraciones, cuando no mentiras, propias de los vencedores. Lo que ahora se reclama es que ahora se haga lo mismo con los atropellos, asesinatos, torturas, violaciones, robos y demás tropelías que sufrieron los republicanos, cuyos restos a diferencia de los de los vencedores, aún reposan en los lugares más indignos, fosas comunes, tapias, ligares apartados de cementerios, etc. Sin olvidar, claro, que muchas de aquellas víctimas lo fueron por defender la legalidad de una República que había sido elegida democráticamente por la mayoría del pueblo español, contra la que se levantó un general fascista apoyado por nazis, fascistas italianos y portugueses y por moros mercenarios. Si vamos a contar, contémoslo todo tal como fue, que ya está bien de mamoneo y milongueo.
¿Cómo van a querer recuperar o limpiar la Memoria Histórica ni penalizar a criminal alguno si seguimos en las mismas manos?. Si no del criminal dictador sí de quienes él mismo designó como sucesores suyos. ¿que criminal muestra voluntariamente las pruebas de su delito?
http://arainfo.org/2015/03/ceaqua-acusa-al-gobierno-espanol-de-proteger-y-amparar-a-los-ministros-franquistas/
Debajo de las alfombras de la Transición, más de 150.000 personas asesinadas por los criminales franquistas siguen abandonadas por los políticos de la Transición. Y ahí siguen todavía para mayor infamia de este régimen y de los que aún lo defienden.
GERARDO IGLESIAS: …»En el bando de la República se mantuvo hasta bien entrada la guerra determinadas garantías Constitucionales en el otro bando:tierra quemada; pero el fondo del problema no es lo que hubo en uno u en otro bando. El fondo del problema es quien ha desencadenado la guerra civil y con que proyecto han desencadenado la guerra civil. El proyecto se resume en aquello que escribió Mola: «Hay que eliminar a todo aquel que no esté de acuerdo con lo que nosotros pensamos».
https://www.youtube.com/watch?v=u4jnqnTAaiw#t=20
¿Por qué estorba la Memoria?
Gerardo Iglesias y Diagonal Asturies:
https://www.youtube.com/watch?v=u4jnqnTAaiw#t=20
No sabemos realmente cuántas fueron las personas asesinadas por los criminales franquistas tras el fin de la guerra civil. Miles de cuerpos fueron sacados de fosas en los años 60 y trasladados a Cuelgamuros (Valle de los caídos), sin el consentimiento de sus familiares, y metidos en cajas en los siniestros depósitos subterráneos de este infame lugar, mezclados con los restos de los muertos del ejército franquista. El franquismo se ocupó de hacer desaparecer muchos de estos restos. No sabemos cuántos fueron, entre 150.000 y 200.000. El PP de forma activa y sus compas en silencio, hace lo posible porque pasen los años y este tema no sea investigado. Mientras no se repare esta herida terrible este régimen no podrá tener ni legitimidad ni dignidad.
Se hablar de Memoria histórica para recordar los asesinatos dle franquismo, que indudablemente fueron muchos. Pero si de lo que se habla es de memoria histórica, lo que no hay que olvidar som los crímenes y desapariciones causados por algunos de los grupos republicanos. Yo soy socialista e hijo de un republicano madrileño que incluso se enroló en una brigada en contra de Franco, ante la amenaza de su invasión de Madrid. Fue camino a Nrihuega y al frente contra Franco Cuando ciertos elementos llamados de izquierda (le asesinaron sin que jamás se encontrara sus cadáver). ejemos las cosas claras: republicanos llamados de inzquierda coetieron indinidad de asesinaros (auqello que en Madrid de denominaban «paseos») por razpn de envidias o desavenencias de una u otra índole. ~Si en lugar de Franco hubiera ganado la guerra el bando Republicano (cada vez más vendid al estalinismo y a la anarquía) España habría caído en una situaciónb semejante a la que vivivmos con Franco: el mismo perro con distinto collar.
Por favor: hagan una memeoria histórica objetiva.
Estoy de acuerdo con JLR.Yo escribí parte de las memorias de mi madre en la revista «Temps de la Memoria de Palma de Mallorca»y debo decir que me respetaron hasta la última tilde de mis escritos,aunque últimamente,por unas razones u otras me cortaron «el grifo» y ya tuve que dejar de ralatar las memorias de mi madre.Yo me siento republicano(claro está con unos valores éticos «de facto» muy superiores al «desmadre» que ocurrió según cuenta el anterior relator y que los mandatarios de la República dijeron «que se les fue de las manos» el control de tantos desmanes.Resumiendo: Mi madre cuenta en un manuscrito que guardo como testimonio de su verdad «vivida» ( que eso es lo importante),que cuando salía por las casas de campo,observaba que habían dos ollas:una grande y otra pequeñita encima de las brasas.Le explicaron:La grande era para comerse lo antes posible los animales cocidos allí,antes de que llegasen «la tropa desorganizada» a mandar que les hiciesen una paella y hartarse con la carne que los padres guardaban celosamente para poder vende los animales por navidades y así poder comprar la dote de las hijas.La olla pequeña era para la tila,por si llegaba la «tropa» y por suerte no pasaba nada,para aliviarles del susto.Y siguen otras afirmaciones de mi madre,más duras,que no considero oportuno alargarme hoy.
Se trata de recordar,de analizar lo que pasó, no hay que ir con prejuicios de entrada,todos los muertos y todos los responsables.