¿Bueno para el PP?

La explosión del PSM de Tomás Gómez detonada por Pedro Sánchez ha generado un diagnóstico casi unánime: ¡Ya le han regalado la elecciones al PP de Madrid! En apenas una semana una parte relevante de IU-CM ha dado un salto hacia adelante dejando atrás a su núcleo dirigente y el aparato del PSM estalla en una guerra civil contra el aparato del PSOE. Mientras y en IU-CM falta por resolverse el conflicto entre quienes se han quedado con la convicción de que conseguirán ir a los espacios de unidad popular y ese núcleo solipsista ¡Así se las ponían a Esperanza Aguirre!

Es curioso: durante años hemos achacado las victorias electorales de un tinglado tan obscenamente corrupto y antisocial como el PP de Madrid a la vergonzosa oposición con que contaba; una oposición que cuando no estaba dando la mano al PP era porque la estaba usando para pegarse un tiro en el pie. Ahora que parece que ambos, PSM e IU-CM andan con tiros en los dos pies, en las manos y fundamentalmente en la sien, el PP podría sentirse feliz… si no hubiera más oposición posible.

Ocurre que  además de esa oposición fallida Madrid es el lugar donde surgió el 15M, donde las mareas han tenido más fuerza, donde la movilización y la pelea ha impedido la privatización de la Sanidad y del Canal de Isabel II… Es una región metropolitana con un montón de activistas, pensadores y movimientos sociales que en buena parte no habían participado en la pelea partidista (o lo habían hecho en una segunda o tercera línea) ante la imposibilidad que generaba el subsistema de partidos madrileños. Quien ha decidido dar esa batalla ha sido en buena parte neutralizado por aparatos que andaban jugando a la política real.

Ese subsistema está colapsando ante nuestros ojos. Ese viejo orden resultó comodísimo para el PP de Madrid y se desmorona. No es ninguna buena noticia para el PP de Madrid porque deja un territorio fértil para otro tipo de oposición que emerja no para la interpretación sino para ganar. Porque tampoco el PP de Madrid está fuerte: hemos perdido la cuenta de las manos derechas e izquierdas de Esperanza Aguirre que están en la cárcel o esperando juicio, de cuántos han espiado o han sido espiados, de cuántos planes de privatización o de construcción han caído por ser ilegales o por ser imposibles con la oposición ciudadana. “Eurovegas y la candidatura olímpica son el mejor ejemplo del gran futuro que tiene la Comunidad de Madrid”, decía Ignacio González en un tuit que tuvo que borrar como quien borra su futuro. En buena parte la crisis de la política madrileña es una consecuencia directa de que hay una conciencia colectiva de que se termina la taifa de Esperanza Aguirre: se acabó el tinglado.

Sólo será una buena noticia para el PP de Madrid este desmoronamiento si somos unos irresponsables y desaprovechamos las semanas que tenemos por delante para construir una alternativa real, sólida y plural a la cultura caciquil y corrupta que ha saqueado nuestra comunidad y nuestros municipios. Si nos ponemosa ello hoy el PP lo tendrá más difícil que ayer y mucho más difícil que hace una semana: se le desmorona una oposición de ficción dejando un hueco maravilloso para una alternativa real que arrebate Madrid a la trama gobernante y la recupere para los madrileños.

Si desaprovechamos la ocasión será imperdonable. Esa sí será una gran noticia para Esperanza Aguirre y sus consiglieri.

Hugo Martínez Abarca es uno de los promotores de la iniciativa Vamos hasta el final