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Así fue el saqueo de Canal Nou
Un año después del cierre de la radio y televisión valencianas comienzan a aparecer las facturas que explican los 1.200 millones de deuda del ente autonómico valenciano
Más de 360 millones de euros fuera de presupuesto de los años 2000 a 2008. 459 millones de euros para pagar a clubes de fútbol por los derechos de retransmisión que luego se vendieron por 224 millones. 14 millones de euros por la retransmisión en la visita del Papa a Valencia en 2006, cuatro de ellos para empresas de la trama Gürtel. Y así, sumando, partida a partida, hasta los cerca de 1.300 millones de deuda con los que acabó RTVV (Canal Nou y Ràdio Nou) en 2013 y que le sirvió al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, para cerrar la radio y la televisión autonómica.
El pasado 28 de noviembre, Canal Nou se fue a negro. El Gobierno valenciano dio la orden definitiva de apagar la señal. Días antes, el pleno de Les Corts Valencianes aprobó la orden de disolución y los trabajadores se hicieron cargo de la programación. Finalmente, los repetidores dejaron de emitir.
La justificación de Fabra para cerrar RTVV fue que el Tribunal Superior de Justicia valenciano anuló el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que dejaba en la calle a más de 1.000 trabajadores. La Justicia le obligaba a readmitir a los trabajadores despedidos. El presidente de la Generalitat rechazó la sentencia y decidió poner fin a las emisiones de Canal Nou. La razón fue económica: “No cerraré ni un sólo colegio u hospital para mantener abierta RTVV”, explicó Fabra entonces.
¿Cómo se llego a esa situación de endeudamiento? Vicent Mifsud es miembro del comité de empresa de RTVV y, cuando se produjo el cierre, su presidente. Él lo tiene claro: “La deuda se generó por un cambio del sistema de financiación en la época de Zaplana”. “A partir del año 2000, la Generalitat comienza a hacer aportaciones presupuestarias a RTVV más bajas de las que tocaban y se recurre al endeudamiento para centrifugar con gastos que no correspondían a su funcionamiento”, explica.
Mifsud denuncia que “cualquier gasto de productoras próximas al PP se hacía fuera de presupuesto con un informe negativo desde tesorería pero con la firma del director general puesto por la Generalitat. “Además, de esa forma, como no había control de gasto, se pagaban cosas desorbitadas”, concluye.
José Luis Moreno, Tómbola, María Abradelo y el Papa
Entre esos gastos desorbitados aparecen varios nombres. Entre ellos destaca el de José Luis Moreno y su productora Alba Adriática. Según denuncia el sindicato CGT, que ha tenido acceso a las facturaciones de esos años, por el programa Planta 25 se pagaron más de seis millones de euros fuera de presupuesto en tres años. El programa constaba de 58 capítulos y fue tal su fracaso que se iba cambiando de horario en la parrilla.
Otro caso de programa pagado fuera de presupuesto, este sí con más éxito, fue Tómbola, el precursor del escándalo en la prensa rosa. De 2000 a 2003 se tuvo que pagar con dinero no presupuestado, otros seis millones de euros. Jesus Mariñas, colaborador de este programa, cobraba 6.000 euros cada vez que acudía a los estudios de Canal Nou en Burjassot para participar en Tómbola. Y otros 1.000 por su participación en otro programa matutino.
El sueldo de Mariñas, y el de otra presentadora como María Abradelo, que llegó a cobrar 270.000 euros en 2002, están muy por encima de los 2.000 o 3.000 euros mensuales que cobraban trabajadores de la casa como Xelo Miralles o Fani Grande.
También el programa El Faro de Alejandría, del presentador Fernando Sánchez Dragó, se pagó fuera de presupuesto: 650.000 euros en dos años, y otro de Julián Lago por el que se pagó cerca de un millón de euros por tres años.
Todas estas facturas se han dado a conocer gracias a la interpelación del grupo de Esquerra Unida en Les Corts y el sindicato CGT las ha incorporado a su denuncia contra los gestores del ente autonómico. Esta denuncia se suma a la que ya presentaron en su día Compromís y el sindicato CCOO. Todas ellas se están viendo en los juzgados de Paterna. Además, la semana que viene tendrá que declarar ante el TSJCV los miembros de la mesa de contratación de RTVV y el expresidente de Les Corts Juan Cotino para aclarar su relación con la trama Gürtel y la organización de la visita del Papa.
Soy partidario de tener una radio y TV públicas valencianas, en nuestro idioma, sin manipular,de tod@s los valencian@s, etc. Utopía ?? No lo sé.
Pero, joer, llevamos 1 año en el que el panorama radiofónico casi copado por emisoras centralistas, valencianas y nuestro idioma quasiRES ; TV valencianas sólo las que le regaló la licencia el sr. Camps y todas en castellá. Se quema una nave en Paterna y ninguna radio ni TV habla del tema a no ser que haya muertos. En Fín, este es el panorama.
Lo triste es que los gobiernos sucesivos valencianos, por contenidos y por gestión nefasta (lo que muestra este artículo), no hayan querido hacer una televisión pública, objetiva, en valenciano/catalán y de calidad.
Lo triste es que la mayoría de gente que trabajaba allá sólo lo reivindicara como mucho cuando ya sabían que se quedaban sin trabajo.
Creo que el derecho a la información, otra vez más, no se ha garantizado.
Desde luecgo, no echo de menos la mayoría de contenidos. Había algunos interesantes en Punt 9, la segunda cadena.
Ahora que se ha cerrado Canal Nou, cadena de TV adelantada a su tiempo, líder en la manipulación más torticera, ejemplo del servilismo y clientelismo hacia el poder más rastrero aparecen numerosas voces hablando de pobres profesionales de la información despedidos, de servicio público, de pérdida de pluralidad informativa, etc. Cuando la triste realidad es que Canal Nou hace décadas que dejó de ser un medio de comunicación para convertirse en una simple maquinaria propagandística al más puro estilo del NODO fascista, en donde las loas a los caciques del PP eran la norma habitual, el desprecio y hasta el insulto más soez a cualquier persona crítica con el poder el pan de cada día y la manipulación, el oscurantismo, el servilismo y la mentira su seña de identidad. http://diario-de-un-ateo.blogspot.com.es/2013/11/pero-que-se-creian-los-periodistas-de.html
¡¡¡Venga ya!!!
Ahora todos a llorar por el cierre de un medio de… ¿comunicación?…., jajajajaja, sí, claro. Justamente de eso.
Yo que he vivido años y años en la comunidad valenciana os puedo asegurar que RTVV era una auténtica porquería; parecería que estaba destinada a personas con el intelecto justo para acabar el día.
Se entiende que sea un dramón para todos los que se han quedado en el paro, etc.
Os puedo asegurar que yo no hacía ni zapping en la RTVV, salvo alguna que otra vez. Era de un nivel más humillante, zarrapastroso, caciquil, vomitivo que incluso TELEMADRID, para que os hagáis una idea.
¡¡¡Pero qué cosas, por favor!!!