El nuevo hospital privado de Madrid amenaza la continuidad de centros públicos

Con tres años de retraso, la Consejería de Sanidad madrileña ha anunciado que esta semana abrirá las puertas el Hospital de Collado-Villalba, un centro sanitario público que gestionará la empresa privada IDC-Salud, la antigua Capio. El centro comenzará a atender pacientes este miércoles, aunque ningún político asistirá a una inauguración oficial que la ‘crisis del ébola’ se ha llevado por delante.

La llegada de este nuevo hospital supondrá una reorganización del mapa sanitario de la Comunidad de Madrid. Según denuncian desde la Coordinadora Anti-Privatización de la Salud Pública (CAS-Madrid), “la apertura de Villalba obligará a cerrar recursos públicos”. Esta organización asegura que las 140 camas individuales del nuevo centro sanitario hará que se cierren en la misma cantidad en los hospitales de Majadahonda y El Escorial.

Una opinión que comparte el Partido Socialista de Madrid, quien en palabras de su portavoz de Sanidad, José Manuel Freire, ha criticado lo que considera un error, ya que el nuevo hospital asumirá pacientes del Puerta de Hierro y del Escorial que no están funcionando al 100% de rendimiento.

En el mismo sentido, CAS-Madrid anuncia que “el hospital público de El Escorial perderá unos 26.000 habitantes, cerrará camas, despedirá a trabajadores y su futuro comienza a cuestionarse”.

Otros de los puntos polémicos del nuevo hospital es el coste. Pese a abrirse con tres años de retraso, la Comunidad de Madrid pagaba cada mes 900.000 euros, unos 20 millones de euros desde que se acabaron las obras. IDC-Salud ha firmado un contrato de 30 años con el gobierno de Ignacio González por 1.817 millones de euros. La empresa ha invertido 110 millones de euros hasta el momento. “Los datos demuestran que este tipo de hospital será entre 6 y 7 veces más caro que si lo construyera el sector público-estatal de la forma tradicional”, denuncia CAS-Madrid.

El nuevo hospital de Collado-Villalba se aloja en los más de 55.600 metros cuadrados de terreno que fueron cedidos hace unos años por el gobierno municipal en manos del PSOE. Se trata de un nuevo centro hospitalario en la zona norte de Madrid, donde se encuentra la población con más recursos económicos de la ciudad, mientras que la Consejería de Sanidad hace oídos sordos a la demanda de zonas como Vallecas, que piden un nuevo hospital que solucione los problemas de demanda actuales.