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El Pacma documenta 50 casos de maltratos a galgos en siete meses
Asociaciones y protectoras de animales denuncian que la mayoría de casos se dan tras el fin de la temporada de caza.
El Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (Pacma) lanzó el pasado 30 de mayo un aviso a través de las redes sociales para que les ayudasen a documentar casos de malos tratos a galgos, coincidiendo con el final del periodo de caza. Una cincuentena de personas enviaron fotos y documentos sobre diferentes maltratos a estos animales hasta final de año.
Para el partido animalista, se trata de la constatación “del maltrato animal en nuestro país que padecen los galgos, podencos y demás perros utilizados para la caza en España”. La mayoría de estos casos nunca fueron denunciados, y en los casos en que sí, la causa fue archivada.
“Detrás de cada cifra hay una historia de sufrimiento y maltrato animal, pero también una historia de coraje y cooperación; la de los voluntarios y las personas que integran las organizaciones que se dedican al rescate, recuperación y adopción de los más de 150.000 perros y gatos abandonados en nuestro país cada año”, comentan en el informe.
Organizaciones como la Asociación Protectora de Animales de Toledo ya han denunciado que el 90% los animales rescatados fueron abandonados o maltratados por cazadores, tras el fin de la temporada de caza. Algo que corrobora el estudio de la Fundación Affinity, donde se destaca que en el año 2010 el 21% de los animales abandonados en Castilla-La Mancha fueron debido al fin de la temporada de caza.
Según los datos publicados en la Memoria de la Fiscalía General del Estado, en el año 2011 se produjeron tan sólo 309 procedimientos judiciales, de los cuales solo se produjeron 32 sentencias condenatorias por Malos Tratos a Animales Domésticos y 10 sentencias absolutorias. El resto de los casos fueron archivados.
Con la publicación de este informe, el Pacma ha querido contrarrestar las declaraciones del jefe del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), José Manuel Vivas, que aseguraba que los casos de maltratos a animales que se utilizaban en la caza era solo una “leyenda negra”.
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Puedo dar fé de que algunos cazadores al final de la temporada abandonan a los perros y éstos deambulan por los pueblos, sucios, sin ningún tipo de control sanitario y a la espera de que alguien les dé comida.
Los jefes de los cotos, hoy día, se han hecho los amos de los pueblos, los nuevos caciques. Disponen más que el alcalde. Por lo visto los cotos dan pasta, (que no siempre se revierte en bien del pueblo), y nunca denunciarán el abandono del perro para no perjudicar a su clíente el cazador.
Incluso en días de caza se permiten cerrar los caminos agrícolas para dar prioridad a la caza antes que a las labores agrícolas.
Y todo esto sucede mientras están desapareciendo aceleradamente, por una u otra causa, especies de aves y de mamíferos lo cual empobrece a la naturaleza y a todos nosotros. Y encima, hay que soportar que llamen «deporte» a exterminar a criaturas menores.
Esto deberia ser castigado y no perdonado por la ley, hay gente de muy poca concienccia y cultura, es una lastima