El BNG pide al Gobierno que explique por qué se han denegado “sin justificación” cientos de becas

MADRID // La denuncia efectuada por numerosos estudiantes de enseñanzas superiores, que aseguraron a este medio que el Ministerio de Educación les ha denegado la cuantía fija por residencia fuera del domicilio familiar pese a cumplir con los requisitos ha llegado ya al Parlamento. El Bloque Nacionalista Galego (BNG), integrado en el Grupo Mixto, registró este viernes una pregunta ante la Mesa del Congreso para que el Gobierno explique “pormenorizadamente”, según reza el escrito, por qué se han denegado estas ayudas vitales para que los alumnos de familias más desfavorecidas puedan proseguir sus estudios.

En la pregunta se interpela al Ministerio de Educación sobre otros aspectos denunciados por los alumnos, que incluso han creado una página de Facebook que ya cuenta con casi 1500 miembros. Por ejemplo, por qué las notificaciones han llegado a altas horas de la noche y en días festivos. El BNG también reclama que se explique en el Parlamento las razones que justifican el hecho de que “en plenas vacaciones navideñas se haya establecido un plazo para reclamar de 15 días naturales cuando las universidades no tienen actividad”.

El mazazo a estos cientos de estudiantes salió a la luz pública cuándo dos hermanas de Valencia, Núria y Aída Garrido, de 18 y 21 años y estudiantes de Periodismo y del doble Grado de Derecho y Administración y Dirección de Empresas respectivamente, iniciaron una movilización en las redes sociales, especialmente en la plataforma de Facebook #BecasMecOut #Cuantía0euros -los dos hashtag creados para la movilización de esta denuncia en Twitter- a la que en una semana se han sumado casi 1.500 afectados.

De esta forma, estas dos estudiantes, miembros de una familia en la que sólo entra el sueldo mileurista de su madre, descubrieron que la notificación recibida por Aída, la hermana mayor-en la que se le reconocía la matrícula gratuita pero se fijaba en 0 euros la ayuda fija por residencia que otros años había recibido siempre-, era prácticamente la misma que había llegado a los correos electrónicos de otros muchos jóvenes que, como ella, aseguran cumplir con los estrictos requisitos académicos y de renta fijados por el departamento que dirige José Ignacio Wert.

Algunos de estos estudiantes con los que ha hablado esta revista, además de los que han ofrecido sus testimonios en las redes sociales, denuncian además que cuando, tras mucho porfiar, han logrado obtener una explicación (en la resolución no se precisan las razones de la denegación y los estudiantes han tenido que llamar al Ministerio o a sus universidades para obtenerla) ésta ha sido confusa. Otras veces, sostienen, se les han ofrecido motivos banales, como por ejemplo un supuesto «cambio de estudios” -denunciaba el joven gaditano Alfredo Fernández- o bien unos inexistentes ingresos en el extranjero, para justificar esa cuantía 0.

Una «vía para recortar»

La diputada por A Coruña del BNG Roxana Pérez Fernández, que firma la pregunta registrada por su partido ante la Mesa del Congreso, explica que “dados los antecedentes del Ministerio de Educación y su política de becas, esto da pie a pensar que podemos estar ante otra vía para recortar y que haya gente que quede fuera de las becas por falta de tiempo para reclamar”. La diputada recalca, en ese sentido, lo «insólito» del plazo que se les ha notificado a los estudiantes para reclamar: sólo 15 días naturales, que no hábiles, en pleno periodo natalicio.

Aunque el portavoz del Ministerio de Educación, Javier García, negó en conversación con La Marea que los alumnos a quienes se ha denegado la cuantía fija de la beca cumplan con los requisitos para ello, como afirman los perjudicados, la opinión de la diputada gallega es muy diferente. Pérez Fernández da crédito a la versión de los afectados pues sostiene que “si estos alumnos se han embarcado en pedir una beca, incluso con todos los obstáculos que ello conlleva, lo han hecho porque sabían que cumplían con los requisitos”.

La parlamentaria deplora, no sólo “la falta total de transparencia” y el proceder «oscurantista y opaco» del Gobierno, sino también “todo lo que ha venido sucediendo desde hace un año y medio, antes incluso de que se presentara el decreto de becas para este año [el mes de agosto]. Todo este tiempo, Educación no ha hecho más que ir poniendo cada vez más obstáculos a la gente que necesita acceder a las becas para seguir estudiando”.

“Esto es un paso más en esa política”, deplora la parlamentaria que además subraya que otro de los extremos denunciados por los universitarios, como es el hecho de que las resoluciones se hayan enviado en plenas navidades, muchas veces en sábado o en domingo y a altas horas de la noche, unos horarios que no son “habituales en una Administración”. Las horas intempestivas a las que se enviaron algunas resoluciones han hecho sospechar a los afectados que el Ministerio pretendía de esa manera ganar tiempo- o incluso que las denegaciones les pasaran inadvertidas-para favorecer que expirara el plazo para presentar alegaciones.

La confusión creada por el decreto de becas aprobado por el Gobierno en agosto, que cambió el sistema de concesión y dividió las ayudas al estudio en una parte fija (la que se ha denegado ahora a los afectados) y otra variable que se calcula según un complicado baremo, ha contribuido a sumir en la incertidumbre a muchos de estos jóvenes. Las hermanas Garrido relataron a La Marea– un extremo corroborado por otros estudiantes-que trabajadores del Ministerio han justificado en algunos casos la denegación de la cuantía fija por traslado de residencia (hasta 1.500 euros) con el argumento de que esta cantidad les será compensada a los alumnos después con lo que perciban en concepto de parte variable de la beca.

Sin embargo, como denuncia Roxana Pérez, es «imposible ahora mismo decir cuánto va a cobrar cada alumno por este parte variable». Para empezar, señala la diputada,»debido a que en el decreto de becas se explicaba cómo se calcula esta parte con una complicada fórmula matemática imposible de desentrañar para un profano en la materia».

“Recuerde usted la fórmula que había en el decreto para supuestamente explicar lo que cada alumno iba a recibir. No la entendía nadie. La propia secretaria de Estado de Educación, cuando compareció este verano en el Congreso, no fue capaz de explicar cómo se calculaba esa parte variable y lo que terminó diciendo fue que la parte variable se calculaba en función de muchas variables,valga la redundancia, como el número de solicitantes de las becas y el dinero que sobra después de repartir la parte fija”, subraya la representante del BNG.

Las becas, «una carrera de obstáculos»

En opinión de Roxana Pérez, “la consecuencia es que nadie puede saber con exactitud cuánto dinero le corresponde de beca al inicio del año escolar, algo que no sucede en ningún país de Europa, por lo que los estudiantes empiezan el curso con la incertidumbre de saber si lo van a poder terminar. Este Gobierno, en vez de facilitar las cosas a las personas que necesitan acceder a estas becas para estudiar, no ha hecho más que ponerles trabas y convertir el hecho de pedir una beca en una carrera de obstáculos”.

“Esto es una política premeditada, como indica lo sucedido con el decreto de becas, así como las distintas declaraciones del ministro Wert sobre las becas Erasmus, una política premeditada de opacidad, confusión e impedimentos incluso para quienes cumplen con los duros requisitos que se exigen para pedir las becas”, deplora la parlamentaria del BNG, que concluye animando a “todos los estudiantes afectados a que reclamen”.

El pasado 2 de agosto, el Gobierno aprobó el decreto de becas elaborado por el departamento de Wert, definido como un “hachazo” por todos los grupos políticos del Parlamento, excepto por el Grupo Popular, y que provocó que la mayor parte de estas ayudas al estudio, que permitían formarse a los estudiantes de familias más desfavorecidas, quedaran reducidas a la mitad.