Opinión
El Tenorio en el corazón simbólico del 15M
"La revolución será feminista o no será. Sirva el Tenorio, ya que estamos hablando de cultura, como metáfora de lo que no vale, por mucho que se quiera travestir de moderno", señala la autora.
Se acerca el 1 de noviembre y año tras año, como una pesadilla recurrente, el Tenorio se representa por todos los rincones. Este año también está previsto que la obra se ofrezca en el Campo de la Cebada, uno de los lugares más emblemáticos de la organización de los barrios, de la participación ciudadana y autogestión cultural que el 15M trajo consigo en Madrid. Es el tercer año consecutivo que la obra se representará en este espacio y en esta ocasión, gracias a una iniciativa de crowdfunding que ha conseguido reunir más de los 4.000 euros necesarios.
Don Juan Tenorio es un drama religioso-fantástico inspirado en El burlador de Sevilla, una obra que se recrea en el arquetipo de caballero español del siglo XVI, un chulo camorrista y violento, que vive de la mentira y el engaño de cualquier mujer que se le cruza en el camino (de las que no se le cruzan, también). Una peripecia de la época que acaba con el sinvergüenza salvando su alma, cómo no, gracias a la bondad de la protagonista femenina, la célebre Doña Inés.
Don Juan Tenorio es machista hasta el ridículo, no hace falta ni decirlo. Es tan absurdo en el siglo XXI, que yo misma me sorprendo de estar escribiendo este artículo. Sin embargo, en la argumentación que hace la compañía que lo representa en el Campo de la Cebada se dicen cosas como éstas: “Es importante mantener las tradiciones y, sobre todo, las que reúnen a gentes de diferente origen o diferentes inquietudes alrededor de un acto comunitario. Eso es Don Juan Tenorio desde el pasado 2011. Hemos crecido en diferentes aspectos en estos años, pero el más importante se mantiene: la reunión en torno al Don Juan. El teatro por antonomasia es la reunión del pueblo ante el hecho teatral. El hecho de compartir un espacio y un tiempo determinado. Y, a todo ello, sumar las emociones que nos regala el teatro. Eso es lo que proponemos a través de Don Juan Tenorio en el Campo de la Cebada”.
Lo he leído unas cuantas veces y no consigo encontrar la relación entre estos párrafos y la obra elegida. ¿De todo el teatro español -por reducirlo a las “tradiciones” a las que se refieren-, no hay otra obra que genere emoción, consenso, disfrute y que, efectivamente, pueda considerarse su representación un acto comunitario?
Si la intención, como aseguran, es “crear un espacio de reunión para todo el barrio y la ciudad. Crear ciudad en este espacio de ciudadanía”, desde luego, se han equivocado. Don Juan Tenorio es el prototipo de aquello que buena parte de la ciudadanía queremos erradicar: la actitud chulesca, el desprecio a las mujeres, la exaltación de algo a lo que llaman amor hasta la muerte… Forma parte de una tradición que habría que desterrar de una vez por todas.
Ya se dijo al comienzo de las movilizaciones ciudadanas, la revolución será feminista o no será. Sirva el Tenorio, ya que estamos hablando de cultura, como metáfora de lo que no vale, por mucho que se quiera travestir de moderno. Sirva como ejemplo de porqué los procesos de cambio tienen que ser inclusivos si no quieren correr el riesgo de quedarse en puro maquillaje. La violencia simbólica del Tenorio debería ser repudiada de oficio por quienes hablan de crear espacios de ciudadanía. Sirva como ejemplo de una izquierda a la que le falta reflexión, le sobra nostalgia o simplemente no acaba de enterarse de que el mundo ha cambiado, por mucho que utilice el crowdfunding y las redes sociales.
VIP??????????????????????????????????????????????
Siento lástima por ti, esta lluvia de critica te la mereces. No tengo otra cosa más que decirte. Te subes al carro del «feminismo» porque está de moda sin saber realmente lo que significa y te pasas por ignorante e intolerante, manifestando una incultura que asusta ¡Cuánto pavor te causan los libros!
¿Y esas películas en las que el hombre va a la guerra y la mujer se queda cuidando a sus hijos en vez de ser el hombre quien le de el pecho al recién nacido? podemos quemarlas para que nunca nadie las pueda reproducir jamás… oh wait!
Y tu psiquiatra que dice de todo esto?
Nuria, te están dando lo que te mereces. ¿No te das cuentas del daño que haces a las mujeres con sandeces como las de este artículo? Anda, tómate la pastilla y tranquilízate un poquito.
Supongo que esos mismos cerebritos revolucionarios que han sacado 4.000 euros para representar El Tenorio pedirán otros 4.000 en diciembre para representar un Belén viviente. La justificación es exactamente la misma.Que si Nuria, que tienes razón por mucho que el Gran Manipulador Reverte se haya querido ganar su buen sueldo Semanal con poco trabajo y a tu costa. Las chicas que dicen lo que piensan siguen corriendo peligro de lapidación. A él en cambio le pagan los insultos a precio de académico de la Lengua.
Tu comentario…Me horroriza,oir hablar de quemas de libros,erradicaciones,prohibiciones.Esto no es lo que hacian,inquisidores,facistas y el nacismo?Que cosa defiende este feminismo,que quiere revertir marginalidad,exclusion a los hombres?.La familia es el nucleo de la sociedad.Hombre y mujer,deben ir juntos con sus individualides,colegiando los pareceres de la vida.El amor y sus derivados,es universal,saca lo mejor de nosotros y aquellos que se vuelven amargos y oscuros,ya venian enfermos.Andan mujeres y hombres,solos y compartiendo agonias con mascotas,aparatos sexuales y soledades,con el nudo gordiano de lo material y el consumismo.Aplicamos por igual,machismo y feminismo,a las parejas homosexuales y seguimos manifestandonos con tabues y rechazos a todo lo que huela diferente.Ver en todo, ese sentido de exclusion,es simple y burdo.Amar y ser amado,respetarnos,y respetar,dar y recibir,compartir,reir y luchar por un mundo donde la pobreza no exista,el derecho a la educacion,la salud,el trabajo y la vivienda,sea igual a todos,la erradicacion si!,a las miserias humanas,que hacen miserables a los hombres,condenar lo que causa el delito y el delito en si.Hay hombres abusivos como mujeres abusivas.Es cierto que la sociedad marginal en mucho el derecho de la mujer,pero ya libre,no vamos en paz y construyendo valores nuevos de civismo,eticas,amor y paz.No sabemos que hacer con nuestras libertades.Religion,estado,familia,sean nuevos,en la paz de la cordura,el amor,el respeto y la diversidad;tratemos de erradicar la violencia,las guerras,el maltrato a la tierra,al ecosistema,a la indolencia y el fanatismo a todas las fobias,a la trata de humanos,la esclavitud laboral,aun existente,la trata de ninos y organos,la droga,el alcholismo,y tanta podedumbre enmascarada,hipocrecias,partidos politicos y politequerias,manipulaciones y ese quitame la paja del ojo,poniendo otra en el ajeno.Libertad,libertades,no libertinaje,serviciales,no servil,amor y no odio,compartir y dialogo,escuchar y hacer,mas que hablar. Y vivir,saber que la vida es unica e irrepetible,vivamosla siendo mejores y tratando de que el mundo sea igual y mejor,juntos,en el milagro de sabernos y estar,de amar y crear,de cuidar y proteger tambien, este segundo en que la transitamos
Lisette
me parece bien. No sólo que se suprima la representación del Tenorio, sino la de todo el teatro del XIX, y cualquier representación artística y cultural que no se acoja a la ley de género y génera.
Hay un montón de obras perniciosas circulando por ahí, con su hedor retrógrado y machista. Ese Quevedo antisemita y pendenciero. ¿Qué me dicen de la Odisea donde Penélope está en casa tejiendo, mientras Ulises, que no ha fregado un plato en su vida, anda por ahí de pendoneo? ¿Cómo es posible que aún se cite esa obra en los colegios? O esa Madame Bovary provinciana y tontaina que es en sí misma un desprecio para la figura de la mujer; la Teresa de Marsé un poco pantalonera…¿por qué aún se pueden leer libros así de terribles? Lolita, La Regenta, El túnel…todas ellas novelas que deben ser erradicadas de las agendas literarias. «Desterradas», para utilizar el término de nuestra amiga.
Y el cine más de lo mismo. La señorita Kubelik de El Apartamento trabajando de ascensorista, símbolo de la opresión machista a la que le someten los jefazos de arriba, y ese John Wayne fascista que se quier cargar a Natalie Wood india en Centauros del desierto; El Duque apunta con su revólver…¡a una mujer!, y esas películas aún siguen a la venta.
Doce hombres sin piedad, otro caso escandaloso. ¿Por qué no ‘Seis hombres y seis mujeres sin piedad’? Otros muchos ejemplos flagrantes: Kim Basinger ganando un Oscar por hacer de prostituta; la Barbara Stanwycky hija de puta de Perdición, que no sólo es cínica y manipuladora sino que se carga al marido, y, como todos sabemos, esas cosas no existen pues la violencia de género es sólo en una dirección.
Los niños de Érase una vez en América pagando a una chavala con comida a cambio de una paja; Marlon Brando sodomizando a Maria Schneider, Glenn Ford cruzándole la cara a Rita Hayworth, o Paul Newman haciendo lo propio con su ex en Veredicto final.
Lo que no es normal tampoco es que por España, estandarte de la paridad, vengan esos demoniacos grupos de rock. Sirva como ejemplo The Rolling Stones, cuyas canciones tienen en muchas ocasiones referencias abiertamente sexuales y utilizando a la mujer de manera prosaica, amén de que no hay ni una sola chica en el grupo.
Limpiemos esta sociedad de la carga machista, eliminemos teatro y cine, cualquier cosa que no sean las obras completas de Isabel Coixet, y evitemos que nuestros hijos vivan con esa lacra.
Realmente, me siento esperanzado al conocer de primera mano el ámbito del feminismo y comprender que la gran mayoría de sus integrantes, a diferencia de usted, no carecen de la materia gris cuya ausencia transforma al revolucionario en inquisidor.
El problema reside en que usted blande la pluma, y sus infantiles ideas agravan un poco más la ruptura que impide el cambio.
Buenas tardes.
Disculpenmé por el lapsus anterior. Obviamente quise decir 15M.
En lo demás me reafirmo.
Gracias.
Verdaderamente yo creía que este tipo de posicionamientos ya no existían. Debe de ser ingenuidad por mi parte, sin duda.
Reducir el Don Juan de Zorrilla a una obra de teatro “machista hasta el ridículo” me hace pensar que quien lo dice no conoce la obra. Y por conocerla me refiero a algo más que que le suene aquello de “¿No es verdad, ángel de amor…?”. Me refiero a haberla leído y, por supuesto a haberla entendido. Me refiero a conocer y comprender el contexto sociocultural, histórico y político que la generó. Al margen de que una obra literaria nos pueda gustar o no estéticamente, nos pueda parecer interesante o aburrida, o sencillamente carente de interés hoy en día, lo que sí es cierto es que antes de aplicarle conceptos creados por nuestra actual cultura deberíamos conocer el momento en que se creó para contextualizarla.
El Don Juan Tenorio es una obra capaz unir a las personas que allí estábamos viéndola porque habla de cosas que estaban vigentes a mediados del siglo XIX y que lo están a principios del siglo XXI: la necesidad del amor, el miedo a la muerte, el sentimiento de culpa, el arrepentimiento, el perdón… El personaje chulesco y la novicia medio tonta son solo estereotipos que transmiten un mensaje, no son el mensaje en sí. Me parece increíble tener que explicarlo…
De todos modos me desdigo de lo que afirmaba al principio. Claro que se que estos posicionamientos siguen existiendo. Cada vez más. Por desgracia se nos martillea a diario con un mensaje perverso que es el que subyace en el artículo de esta señora: no pienses, no busques interpretaciones, no profundices en los problemas, no intentes cuestionarte nada. Trágate la píldora del feminismo como antes te tenías que tragar la de la “unidad de destino en la universal”, que era la que tocaba, o en el pasado fueron otras. Los fanatismos se alimentan de esto, de la falta de criterio, de la falta de autocrítica y del olvido de la Historia y del pasado. Dejemos atrás la tradición, nos dicen, mejor aún, ni siquiera la conozcas, cuanto menos tengas para comparar más manipulable serás, más podrán hacer contigo lo que quieran y encima te creerás en la cima de la modernidad. Pueblo ignorante, pueblo sumiso. Redondo.
El Tenorio es casposo, anticuado y machista, nada digno de un ámbito cultural del 11M como es el Campo de la Cebada. Yo no se, soy ignorante en esto, hasta qué punto La Cebada está vinculada a este movimiento popular. Pero si es así (que insisto, lo desconozco), puestos a criticar por criticar, a mi me llama mucho más la atención el lugar elegido para representar el espíritu del 11M: en la Plaza de la Cebada estuvo instalado en el siglo XIX el patíbulo de Madrid, vamos, donde se ajusticiaba a criminales o simplemente a los que transgredían el orden establecido. Allí ajusticiaron a Riego entre los abucheos de los madrileños que le increpaban por haber intentado echar abajo el poder absolutista de Fernando VII. La coincidencia no deja de tener su gracia.
Yo no voy a decir si soy hombre o mujer, porque es irrelevante, porque mi sexo no debería condicionar lo que otros opinan de mis palabras. Y quien necesite saberlo debería plantearse porqué supedita lo que tiene en la cabeza a lo que yo tenga entre las piernas.
La otra noche en el Campo de la Cebada me emocioné, como hacía mucho tiempo que no lo hacía con el teatro (y eso que no me suelen gustar los montajes modernos). Pero cuando doña Inés dice: “el amor salvó a don Juan al pie de la sepultura”, sigue teniendo el mismo sentido, cuando se escribió y ahora, para hombres y para mujeres: el hecho de que el amor de alguien puede llegar a sacar lo mejor de nosotros mismos. No me parece una mala lección para aprenderla, y desde luego no creo que esté fuera de lugar hoy en día.
Es una pena ciertos comentarios que se escriben aquí. Empezando por las que se hacen de feministas y terminando por los que quieren quemar libros. Pero, que cultura es esta?
La que escribe el artículo no tiene ni idea de lo que está diciendo. Ahora resulta que el Campo de la Cebada se lo han apropiado los del 15M. Aquí se ve que cada uno va cogiendo de Madrid lo que le da la gana!! Antes de escribir…¡¡Infórmate!! Ahora resulta que tendríamos que desterrar muchas de las obras clásicas de nuestra literatura por machistas. Que pena me da, esas mujeres que se hacen llamar feministas!! Mujeres que muchas de las que se hacen llamar así, se suben la falda y se bajan el escote antes de entrar en el despacho del jefe para ver si se anima a subirle el sueldo, mujeres que solo quieren y manipulan a los hombres diciéndoles que están enamoradas, solo para saciar su apetito sexual y cuando ya se han comido el cocido completo, lo que queda…¡¡A la basura!! Total que utilizan sus dotes femeninas para conseguir lo que quieren ¿Qué diferencia hay de esas mujeres feministas que se burlan de los hombres, a ese Don Juan burlesco? Muchas de estas mujeres viven entre nosotros, son actuales, del día de hoy. Y por último, el que quiere quemar los libros. Tendríamos que empezar por la Biblia. Pero de qué habláis? Como Española siempre defenderé la literatura y también como Española digo que a palabras necias, oídos sordos!! Y que el demonio cuando no tiene nada que hacer, con el rabo mata moscas.
No puedo creerlo… creo que tú es la que debes de informarte, por cierto Nuria Varela tiene un libro excelente para hacerlo, de hecho se llama «Feminismo para principiantes». No escribiré más.
Se cree un tonto que por decir una tontería y tener a cientos de idiotas como él aplaudiéndola deja de ser una bobada lo que acaba de decir.
Una estupidez sigue siendo una estupidez por mucho estúpido que la secunde.
Esto pasa en política donde cientos de miles de idiotas secundan a alguien más lelo que ellos. Esto pasa en el deporte, pasa en todos los ámbitos y, por supuesto, pasa aquí también con este artículo que es una auténtica sandez.
Más os valdría preocuparos por cosas más importantes y verdaderamente opresoras que la literatura.
Y enlazo el artículo que me ha traído a ustedes, y que refleja mi opinión y creo, la de muchos más.
http://www.jotdown.es/2013/10/propuesta-de-libros-para-desterrar-tras-la-revolucion/
Señores, no sé si me dan más pena, o vergüenza ajena. Lean la obra, anda, y de paso, la Odisea, La Ilíada, Otelo el negro o Ricardo III. Igual aprenden algo de literatura y dejan de decir tonterías.
Y si tratan ustedes de ser irónicos, pues disculpas pido por adelantado, pero es que apuesto uno de mis testículos opresores y falócratas de amante del Don Juan Tenorio que lo dicen en serio.
Me considero feminista y este artículo me parece moralina pacata y barata. Una insensatez total. La lista de libros a prohibir por este lógica sería interminable y nos quedaríamos casi sin clásicos.
Cuestionar tradiciones,
cuestionar clásicos,
cuestionar al tenorio,
cuestionar la obra teatral,
cuestionar el espacio escénico,
cuestionar la opinión del público,
cuestionar a los mismos actores/actrices…
Gracias a la autora de este artículo por atreverse a cuestionar.
Me considero feminista pero no comparto la opinión de la autora. Me encanta el Tenorio y, siempre que puedo, voy a alguna representación callejera por estas fechas.
Yo entiendo en la obra un mensaje muy crítico a los roles tan rígidos de sus personajes: la virtud, el honor, la obediencia, el matrimonio obligado… donde todo termina fatal por llevarlos al extremo, pasando por encima de la voluntad de las personas. Al final, es Dios quien condena y salva en la obra, signo de los tiempos en que fue escrita… ¿No salvamos todos a los sinceros y condenamos a los intransigentes?
Puede gustarte o no la obra pero, no encuentro contradicción entre ser feminista y, a la vez, «muy fan» del Tenorio.
Las mujeres que trabajamos en este proyecto no nos sentimos afectadas por ningún comportamiento machista, ni chulesco. Ni dentro del equipo, evidentemente, ni tampoco representando «Don Juan Tenorio». Si fuera así, no participaríamos en él. Lo que sí nos puede afectar es que se ponga en duda nuestra inteligencia a la hora de querer pertenecer a este montaje. Si este tema le preocupa tanto a la autora como para escribir un artículo al respecto, hubiera sido más coherente que se hubiera pasado por el Campo de Cebada a hablar con cualquiera de nosotras, que le habríamos explicado encantadas nuestros motivos para revisitar este clásico. Y por qué nos parece que este texto puede ponerse en escena. Este, y no otro. Este en el Campo de Cebada, y no en otro sitio. Este, por tercer año consecutivo, sin ayudas institucionales ni subvenciones y de manera altruista. Tal vez después de esa charla nos hubiéramos comprendido un poco mejor los unos a los otros. Y las unas a las otras, también.
Fanáticos, son fanáticos que adoran a Valerie Solanas y, no es raro visto el nivel, ni siquiera lo saben…
Saludemos a los nuevos supremacistas femeninos!
Sieg Heil!
Ahora iros ver la película de %o Sombras de Grey.
Hay que ser hipócritas.
¡Ah, por cierto! La que redacta la noticia trabajó en el interviú.
Falacia ad hominem. No estoy de acuerdo, ni mucho menos, con el artículo; pero criticar un argumento irracional con otro del mismo tipo no me parece loable.
Sí eso, que quiten el Tenorio, que huele a rancio, y se vayan todas a ver la peli de «50 sombras de Grey», que eso sí que es moderno y para nada sexista. Valientes hipócritas.
Mucho cuidado con el respeto a según qué tradiciones. La tradición en los paises subsaharianos de practicar la ablación a las niñas es tan antigua que ni siquiera se sabe hasta cuando se remonta. Tradición y respeto no tienen porque ir unidos necesariamente. En muchos casos es más bien al contrario, hemos de superar lo que manda la tradición para avanzar. La ablación de las niñas y la representación del Tenorio no son comparables, es cierto. La visión de la mujer que subyace a ambos hechos sí lo es.
No te puedes imaginar el gusto que me da leer tu comentario: el caso de la ablación es el que pongo siempre como ejemplo de lo relativo del valor de la tradición. Un saludo, compañera.
Comparar una práctica mutiladora con una representación artística sí que es para hacérselo mirar.
Y la visión de la mujer que subyace a ambos hechos tampoco es comparable. Entre otras cosas porque El Tenorio no es un hecho, es una obra teatral, una representación. Es como comparar la tradición de la Semana Santa con la práctica de la crucifixión romana.
Dentro de poco serán las 3, pero ojo, que a las 3 serán las 2. Ya tengo las uvas preparadas y todo el tinglao. Son cinco en total, 3 para las 3, y luego otras 2 uvas para las 2. Bueno, es un mogollón que lo flipas, pero lo pienso celebrar de todos modos. Feliz cambio de hora!!!
Lo primero, por aclarar, es que El Campo de Cebada no está gestionado por ninguna asamblead el 15M. Su creación es anterior al 15 de mayo de 2011 y se trata de un espacio cedido a la FRAVM y gestionado por vecinos y diversos colectivos. No sé por qué Nuria Varela es tan ambigua en este punto. Ni siquiera lo gestiona ninguna organización que pretenda ser de izquierdas, antiguas o modernas.
Por otro lado, existen clásicos que, por pertenecer a su tiempo, incorporan un lenguaje y unos valores patriarcales, pero el Juan Tenorio es apología de la violencia machista, hace cuatro siglos y ahora. Yo he visto la obra y la puesta en escena no cambia esto ni un ápice, de hecho parece que ni se lo han planteado.
[…] Nuria Varela publicó este artículo el La Marea reflexionando sobre la pertinencia de la representación de Don Juan Tenorio en un espacio al aire […]
No todo vale. Juan Tenorio representa lo q venimos denunciando desde hace años y seguimos en la misma lucha. no se trata de quemar textos sino de empezar a cambiar la hstoria. Gracias Nuria por este articulo
Maravillosa Nuria Varela. Es incompatible luchar por la igualdad y defender nuestros derechos, y luego sentarse a ver el juan tenorio como si nada. Es dañino no hacerse carga de esta situación porque tragamos la violencia de una forma tan sibilina que lo disfrazamos de tradiciones y cultura. Si una mujer del siglo XVII levantara la cabeza y viera esta obra representada con el mismo texto y el mismo argumento. lloraría. Nada hemos aprendido.
Bla bla bla nadie ha visto el Tenorio en La Cebada y critican si saber, hablar por hablar
A no me preocupa la obra literaria escogida porque, como bien dicen por ahí arriba, es una pieza clave de la literatura, igual que El Libro del Buen Amor, La Celestina, El Quijote y tantas y tantas obras que no encajarían en el ideal ‘revolucionario’ y no por ello habría que desterrar o quemar.
A mí me preocupa que el 15M haya quedado solamente para representaciones teatrales, óperas bufas, cabalgatas indignadas, chulapas indignadas, chocolatadas y barbacoas y que, aún así, se siga creyendo algún tipo de motor de cambio.
Me parece penoso que con la de personas que hay pasando hambre se haga un crowfunding de 4000 euros para que unos cuantos se lo pasen bien una tarde. Y no me parecería penoso si esas personas por lo menos no fueran por ahí intentando engañar a la gente con bonitas palabras de revoluciones pasadas.
Precisamente lo que critica el Don Juan Tenorio es la actitud chulesca y machista, ya que después se arrepiente y sufre un ataque de sus vistias. Lo que nos enseña el Don Juan Tenorio es solo un hecho morl de la época, solo por medio del arrepentimiento de nuestros actos podemos lelgar a salvarnos. Por otro lado se ha elegido esta obra porque es el dia de todos los santos, y si usted se ha leido la obra se dará cuenta de que los muertso resucitan de sus tumbas para atacar a Don Juan. Yo no seusted, pero yo prefiero una obra española con profundidad que una fiesta de Halloween , vacía, capitalista y exportada. Sin mencionar el valor artistico de la obra, si por usted fuera en vez de aprender borraría de la faz de la tierra todo arte pasado , porque puede tener otro pensamiento diferente al actual. El feminismo mal entendido puede dar lugar a prohibiciones injustificadas.
Nuria Varela, trabajando para Interviú durante 13 años, de manera muy respetable, realizando una labor admirable, y que poco o nada tiene que ver con la línea de la revista, una de las más relevantes históricamente en nuestro país a nivel periodístico, todo sea dicho, gestionando un esfuerzo, que ni mucho menos tiene que ver con sus portadas, o con el público al que van dirigidas, me gustaría que me respondiera a la siguiente pregunta: ¿no le preocupa que afecte a su imagen como feminista el que alguien pudiera juzgar su trabajo pensando que esa revista es un claro ejemplo de símbolo machista del que usted formó parte hasta el año 2006? Se lo pregunto sin acritud, es simple curiosidad. Medite. Ánimo, un saludo.
No se trata de quemar obras, sino de no hacer una exaltación de unos valores de siglos pasados que deberíamos haber superado. Sería mucho más interesante, y un reto profesional de lo más jugoso, el hacer una adaptación del Don Juan a nuestros tiempos, con otros valores.
Estoy totalmente de acuerdo con Nuria Varela, yo no lo podría haber dicho mejor.
Y aprovecho para aportar a los comentaristas que el feminismo no es una cosa de mujeres, ni «algo relativo a las mujeres». La palabra feminismo no es antónima a la palabra machismo. Se trata de superar las desigualdades de los roles de género, buscando ya no ser iguales, sino un equilibrio en el que todas y todos podamos vivir en paz y pudiendo desarrollarnos plenamente.
Eso es lo que se hace ANA en la cebada, una visión inteligente superando ese mito de don Juan. Una pena que no vayais nunca a verla y os dediquéis a esparcir mierda por blogs feministas, ciudadanos o lo que queráis ser, que libres sois de hacerlo. Pero cuando uno se mete en camisas de once varas que sea con argumentos.
SI SI, VALE, como el Romeo y Julieta cuando salia el brat pit.. asi quedaria genial.
a no para, no era el pit, era el que se ahogo en el titaniq, de cuyo nombre.. no quiero acordarme.
P.D Me lo estoy pasando genial con esta entrada, ya tenia yo ganas de reirme un poco de los demas, cansado estaba de reirme de mi mismo.LUMBRERAS
Gracias Nuria, por visibilizar y analizar violencias simbólicas, y por fomentar el debate y la reflexión crítica entre todas las gentes que habitamos en El Campo.
¿a esta estupidez humana le llamas redlexión o debate?.
Tanti gusto me daba verla arder que dexia:¡ministro soy de la Santa Inquisixión!.
‘Llame al cielo y ni me oyo,
Y si el cielo sus puertas me cierra
De mis pasos en la tierra
REsponda el cielo y no yo»
(Zas, clava su espada, no el el co ño de la manceba ademas de doncella. Sino el las tripas de su suegro.
Malditta obra violenta y sx
A propósito de este debate, me gustaría colocar que cualquier expresión cultural tiene muchas más esferas y alcances que la propia expresión cultural en si, dependiendo de cuánto ella es representada, en qué espacios y ante qué públicos. Es más, se interpretan y calan de muy diferentes maneras también dependiendo a qué públicos se les muestra, en qué contextos socioculturales y territoriales. Y no da para opinar mucho de cultura sin estar dimensionando estos aspectos, Y es aquí donde el artículo de Nuria tiene toda cabida para hacer la crítica que está haciendo. Tres representaciones en un espacio que construye cada día una narrativa intentando de-construir positivamente la tendencia social machista que marca esta obra, es significativo de cómo no está dialogando la expresión cultural que se oferta en el espacio donde se propone su representación, y con lo que el espacio mismo construye día a día. Parece una contra-narrativa algo peligrosa en el avance de lo que propone el Campo de Cebada entorno al empoderamiento positivo femenino, con el consiguiente peligro mayor; las expresiones culturales y artísticas (sobre todo de esta calidad maestra) tienen un impacto mayor por necesidad en las narrativas que el que tiene la humilde aportación diaria de las personas que día a día con ilusión, trabajo y las horas que no tienen luchan contra estos malos vicios en los que hemos caído socialmente
Oye, pues qué bien que se hable de esto. Que parece que a la izquierda no se le puede siquiera mencionar que es machista, que tan progre que es ella, se ofende y se acongoja enseguida.
Enhorabuena por el texto y gracias a La Marea por hacer de plataforma.
Como siempre, cualquier artículo que contenga la palabra -feminista- desata un montón de comentarios críticos, muchas veces derivados de interpretaciones erroneas. En mi caso sólo puedo decir que agradezco las reflexiones de la autora y que coincido en que deberíamos ser capaces de debatir si es «Don Juan» la obra puede servir de unión de la ciudadanía en un espacio recuperado como el campo de la cebada
Como «la ciudadanía» debamos unirnos a analfabetas como vd., lo llevamos claro.
Este artículo es una ironía, ¿verdad? No creo que esté sugiriendo que una de las obras más importantes de la literatura hispánica -que es una genialidad si se representa con una buena puesta en escena- tenga que ser erradicada porque «es machista hasta el ridículo». Quedarse con el machismo inherente al personaje de don Juan es algo que merece muchísimos adjetivos, y ninguno es positivo.
Le guste o no, Don Juan Tenorio es una obra fundamental de la que se puede disfrutar sin sentir que se esté siendo cómplice de algo que fomente el machismo.
Este artículo, sin embargo, demuestra, al menos, una cosa: que entre estas ideas feministas y las de aquellos que quemaban libros hay una línea MUY fina. Y eso sí que es algo que debería repudiarse de oficio
¿Usted piensa que Doña Inés podría ser portada de Interviú?
«la revolución será feminista o no será» Si esto es un punto de vista feminista, entonces que no sea.
[…] este artículo de Nuria Varela publicado hoy en La Marea: una reflexión en torno a la representación de Don Juan Tenorio en El Campo de Cebada. […]
Como siempre Nuria acierta en sus opiniones, son injustificables determinadas justificaciones.
Deberíamos quemar todos los ejemplares de tan nefasta obra. ¡Igual que la Odisea de Homero! estos griegos machistas… ya ves, Penélope 20 años encerrada en casa cosiendo mientras esperaba a su marido, que estaba de jarana en un barco con los amigotes. ¡Qué valores son esos!
Con gente tan corta de miras como usted, con una visión crítica tan superficial, cualquier revolución va a ser imposible.