Sociedad
El gobierno excluye a lesbianas y mujeres sin pareja de los tratamientos de fertilidad públicos
El próximo martes, el Consejo Interterritorial debatirá y aprobará la reestructuración de la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud
El Ministerio de Sanidad está estudiando una propuesta para dejar fuera de la cobertura pública a los tratamientos de fertilidad a mujeres sin pareja y lesbianas.
De este modo, el perfil que podría tener acceso a este tratamiento financiado por el sistema público de salud sería el de una pareja formada por una mujer menor de 40 años y un hombre de menos de 55, sin ningún hijo común previo y sano y que cuenten con un diagnóstico de esterilidad tras haber realizado el correspondiente estudio, según ha adelantado hoy la Cadena Ser.
La propuesta que se presentará y debatirá el martes en el Consejo Interterritorial de Salud con las comunidades autónomas, ha nacido a propuesta de un grupo de expertos que está asesorando al gobierno en la reforma de la cartera de servicios de la sanidad pública.
Cribado del cáncer
Por otro lado, en la reunión del martes también está previsto que se aprueben los cribados del cáncer. En principio, los expertos proponen incluir en la cartera tres cribados: las pruebas de detección para prevenir el cáncer de mama, el de cuello de útero y el de colon.
Según la emisora, para el programa de cribado del cáncer de mama proponen la realización de la mamografía cada dos años a mujeres de entre 50 y 69 años de edad. Hay cinco comunidades que adelantan el programa a los 45 años.
En el caso del cáncer colorrectal, los expertos proponen una prueba de sangre en las heces cada dos años para la población de 50 a los 69 años. En cuanto al cáncer de cervix, citología cada tres o cinco años para mujeres con edades comprendidas entre los 25 y los 65 años. En opinión de los expertos, se trata de un tumor con baja incidencia y mortalidad porque desde hace décadas un alto porcentaje de mujeres se hace la exploración.
Finalmente, el grupo de expertos no cree conveniente incluir cribados para el resto de tumores malignos porque no ven suficiente evidencia de que las pruebas produzcan un beneficio que compense los efectos adversos que podrían suponer, por lo que consideran que no está justificada su realización ni desde el punto de vista individual ni poblacional.