Economía social | Sociedad
Conseguir un techo en un país de viviendas vacías
La cooperativa Sostre Cívic promueve la tenencia colectiva de las viviendas y que los asociados tengan el derecho de uso por un tiempo ilimitado
Artículo publicado en el número de junio de 2013 de La Marea, disponible en nuestra tienda online
Según los datos del Censo de Población y Viviendas de 2011, en España había ese año más de 3 millones de viviendas vacías. En la actualidad, son muchas más. Inmuebles sin habitantes a los que es difícil dar una salida en el mercado inmobiliario tradicional. La cooperativa Sostre Cívic (Techo Cívico, en catalán) promueve un nuevo camino de acceso a la vivienda, basado en la propiedad colectiva. La labor es doble. Por un lado, ofrecer acuerdos a las personas que tienen patrimonio inmobiliario para que permitan a la cooperativa disponer de estas viviendas, que luego se ofrecen a las personas que necesitan una casa. A cambio, Sostre Civic asume el mantenimiento de los inmuebles, su rehabilitación y/o el pago de una cantidad económica.
“La cooperativa nació en el 2005 como consecuencia de la previsible crisis en el sector del acceso a la vivienda. Nos preguntamos por qué en España existe sólo la compraventa, muy poco alquiler y de forma poco atractiva, cuando en otros países existen formas más flexibles, más participadas y con otros valores que no sean la acumulación de plusvalías de unos pocos”, explica el ingeniero y presidente de Sostre Cívic, Raül Robert.
La cooperativa entiende la vivienda como un bien de uso y promueve la tenencia colectiva de las casas, así como que las personas socias tengan un derecho de uso indefinido a través de una entrada inicial y de una cuota periódica.
Pacto con la propiedad
Para ello, buscan llegar a acuerdos con los propietarios de las viviendas vacías, ya sean pisos en un pueblo o una ciudad, o masías en el campo, para hacerse con la gestión de estos bienes a cambio de una cantidad económica, o de un pago y su rehabilitación, según los casos. “Se le hace ver a la propiedad que la cooperativa se hará cargo del mantenimiento, mejoras, seguro del edificio y lo tendrá en buen estado a cambio de gestionarlo durante un tiempo o de forma indefinida”, señala Robert.
Las personas interesadas en acceder a una vivienda se hacen socias expectantes, con una aportación retornable de 100 euros que les permite acceder a asesoramiento gratuito por parte de la cooperativa. Actualmente, son cerca de 1.200 las personas interesadas, por unas 130 que son ya socias. Éstas pueden buscar ellas mismas nuevos proyectos o edificios vacíos, o esperar a que esté disponible una vivienda.
“El objetivo es que este socio expectante se convierta lo más pronto posible en socio usuario”, apunta Robert. Las personas acceden a la vivienda en diversos regímenes, ya sea mediante un alquiler, una cesión o un derecho de uso, y con precios que van desde los 150 a los 475 euros mensuales.
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Necesidades
La cooperativa permite a sus asociados acceder a una vivienda y desarrolla los proyectos en función de las necesidades de sus socios.
Rehabilitación
La rehabilitación de inmuebles es uno de los puntos importantes de Sostre Cívic, que cuenta con profesionales capaces de mejorar las viviendas y devolverles una vida útil.
Tenencia colectiva
En contraposición a las leyes del mercado inmobiliario, la cooperativa impulsa la tenencia colectiva de las viviendas y su gestión democrática, con el fin de que su uso no esté sujeto a la especulación y sea un bien accesible.