Sociedad
Aumenta el apoyo de los clubes de fútbol a los grupos ultra
Según Interior, los casos de violencia apoyados por los propios equipos se han incrementado en los últimos dos años.
¿Vuelve la violencia ultra a los campos de fútbol? Tal vez nunca se fue, si hacemos caso a los datos ofrecidos por el Ministerio de Interior a una respuesta del diputado de Izquierda Unida, Ricardo Sixto.
Según el departamento que dirige Jorge Fernández Díaz, aunque en el año 2011 no se registraron “casos de esa naturaleza”, eufemismo para referirse al apoyo explícito de los clubes de fútbol a los grupos ultras, el año pasado se contabilizaron cinco casos y hasta abril de este año ya hay cuatro.
En la respuesta no se especifica el nombre de los equipos ni se detallan los casos concretos. Lo que sí se dice es que durante 2011 se registraron 16 incidentes en los estadios de fútbol de Primera, Segunda y Segunda División B, siendo propuestas para sanción un total de 23 personas. Por lo que se refiere a 2012, el número total de este tipo de incidentes fue de cinco, habiéndose propuesto sanción a otras tantas personas. En el tiempo transcurrido de 2013, se han registrado dos “incidentes de esta naturaleza”, dando lugar a la propuesta de sanción de esos dos aficionados.
Desde el grupo parlamentario de Izquierda Unida creen que estos datos revelan un «claro incremento» de los casos en que los clubes favorecen la actuación de grupos violentos, y se pregunta por qué no se presentaron, en la respuesta, los planes de seguimiento y acción para impedir su presencia en espectáculos deportivos.
En su escrito, Ricardo Sixto recuerda que a mediados del mes de febrero de 2013 un árbitro valenciano de 17 años perdió el bazo tras sufrir una paliza durante un partido de Segunda Regional. Asimismo, Esteban Ibarra, portavoz de ‘Movimiento contra la Intolerancia’, expresó su apoyo a las declaraciones del jugador del Barcelona, Daniel Alves, quien denunció que en los campos de fútbol españoles sigue habiendo racismo.
La respuesta oficial es que “en aquellos casos en que se detectan acciones de favorecimiento de estos grupos por parte de los clubes, se procede a poner los hechos en conocimiento de la Comisión Estatal contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte para que, si así procede, se propongan a las autoridades competentes las sanciones que pudieran corresponder”.