Opinión
La burbuja progresista, en el nº 4 de La Marea
Antonio Baños analiza las burbujas de percepción de "sociatas y afines, dicho sea con castiza ternura". Con tres ejemplos: Beatriz Talegón, Ignacio Fernández Toxo y Antonio Muñoz Molina.
«No sólo de cemento se hacen las burbujas». El periodista Antonio Baños analiza -en el nº 4 de La Marea, a la venta en kioscos y en nuestra web– las «burbujas de percepción de sociatas y afines», con tres ejemplos recientes: Beatriz Talegón, Toxo y Antonio Muñoz Molina. Personas que, explica Baños, pretenden «hacerse pasar por quincemeros, mareanos, regeneracionistas y otras especies que acaban de descubrir en el telediario». Reproducimos el fragmento dedicado a Muñoz Molina.
«Ejemplo 3 – Muñoz Molina
Y ahora, el burbujo intelectual. Es el epítome del “intelectual-progresista-del-rollo”. Pura Cultura de la Transición con barba. Refugiado en novelas sobre el 36 mientras Roldán huía, las fábricas se desmantelaban, las pateras se hundían y los BMW se multiplicaban. Refugiado en la Academia, el Cervantes y El País mientras todo se inflaba. Y ahora, bien aconsejado, publica un librito “a la Hessel” justo a tiempo para limpiar sus pecados (Todo lo que era sólido). Cree que los chavales del 15-M olvidarán su cruzada feroz e idiota a favor de la SGAE, que le perdonarán haber vivido del momio en los años del pelotazo. Cree el progre que con su superioridad moral basada en esa cosa difusa del “yo-acabé-con-la–dictadura-y-traje-la-democracia” le será suficiente.
El Zola de Úbeda critica con desafuero juvenil (ahora, en 2013) los mamoneos de políticos y altos funcionarios que pasaban por su Instituto Cervantes de Nueva York que dirigía entre sarao y cenita. Muñoz veía todo el despilfarro pero no se le ocurrió dimitir escandalizado. Ahora sí lo denuncia, porque la denuncia es trendy. “Me planteo cómo puede ser que yo, que me dedico a prestar atención a la realidad y a escribir sobre ella, no viera muchas cosas que estaban pasando”, dijo a Vanity Fair. “Estábamos muy distraídos”, remata el tío con una jeta descomunal. Y es bien verdad. Si uno repasa los artículos de su esposa Elvira Lindo en el Pravda del progresismo, veremos que estos preclaros intelectuales orgánicos se pasaron las dos últimas décadas buscando el mejor sushi de Manhattan o reflexionando sobre si al novelista le olían los calcetines a croqueta o a volován.
Frases como la también recogida por Vanity Fair -“Las cosas pueden ir a mejor, pero también a peor”- son de esas que toda persona confusa necesita saber. Y que convierten en imprescindibles a toda una generación de intelectuales. Imprescindibles para encerrar en las mazmorras del olvido.
[Más información en el nº 4 de La Marea]
A estas alturas no creo que mucha gente vea a Muñoz Molina más «progresista» que Hermann Tertsch o César Vidal, por poner dos ejemplos que le son ideológicamente bastante próximos. O sea que Muñoz Molina ya no llega ni a progre, es un falangista pueblerino, nada más.
Yo cada vez que leo eso de «superar las etiquetas derecha e izquierda» o que son caducas y desfasadas, me echo a temblar pero no sabéis cómo…
La acción política (y toda propuesta sobre la organización de la convivencia en sociedad es política, por más que algunos pretendan huir de la palabra como de la peste) pretendidamente ejercida sin ideología solo puede ser dos cosas: un disfraz de ideología derechista o el fascismo.
No existe la política sin ideología, no se puede hacer política sin un modelo económico y social.
Se podrán renovar y adaptar conceptos, adaptar propuestas al momento actual, variar matices,…. pero quienes yo huyo como de la peste es de quienes dicen «haber superado» los conceptos derecha e izquierda.
Esto no tiene nada que ver con que algunos que pretenden ser de izquierdas en realidad sean de la derecha civilizada, y creo que todos sabéis a qué partido socio-liberal que no quiero ni mentar me refiero.
Pero yo soy de IZQUIERDAS, aspiro a un modelo económico y social de izquierdas, y todo lo que no vaya por ahí no me interesa.
Pues SI.
Estoy de acuerdo con el señor X en evitar las etiquetas de izquierda y derecha, porque están obsoletas. La diferencia siempre ha estado en si preferimos políticas que construyan sociedad, que a los yanquis tanto asustan, contribuyendo entre todos a garantizar una educación, una sanidad, unas infraestructuras de comunicación y servicios que aumenten nuestra calidad de vida, o bien, nos dejamos llevar por los liberal, que postulan la eficacia del rendimiento económico y lo llevan únicamente a obtener el beneficio neto. Para ellos, la educación pasa por que pagues íntegramente todo, y de paso le dejes un pellizco, porque tu salud dependerá de criterios económicos, que pasa si deja de haber infartos y no compensa tener una unidad para ello, que sencillamente morirás, cuando quieras viajar pagarás, el combustible, el peaje, el agua de la concesión de la autopista … y veremos si también por orinar.
Dejemos de pelearnos con el y tu más y centrémonos en promover partidos, corrientes y actitudes que creen sociedad, no una selva en la que si no tienes no vales nada…
Proponer evitar la etiqueta «izquierda» para a continuación reclamar medidas claramente de izquierdas…. ¿propones mentir? ¿propones engañar? ¿propones no revelar tus verdaderas intenciones? ¿propones confundir al personal? ¿propones no poner nombre a lo que haces? ¿propones no llamar a las cosas por su nombre? ¿propones fingir la imposible transversalidad mientras haces política de izquierdas?
¿Por qué tengo que hacer ninguna de esas cosas? ¿Por qué tengo que negar que lo que hago y propongo es de izquierdas? ¿Desde cuándo hay que avergonzarse u ocultar lo que uno hace y hacia dónde se dirige? Eso solo lo hacen quienes tienen intereses espúreos, y yo NO los tengo.
Soy de IZQUIERDAS.
El cinismo y la hipocresía hay que denunciarlos. Desenmascarar la mentira, la farsa. Por ejemplo ¿quién cree, a estas alturas, que El País o eldiario.es con Cebrián y Escolar son de izquierdas? ¿Por qué está mal señalar a los embaucadores? ¿Qué motivo existe entonces para no contraponer lo que presume Muñoz Molina con cómo actúa?
Si no se hace, se estaría dando la razón a los del PP con el escrache. Si alguien vota algo, se supone por el bien del pueblo, ¿por qué le atemoriza o le cabrea que lo señalen por lo que en conciencia ha votado?
Hay que quitar caretas, sobre todo si son de estos salvademocracias, otra forma de salvapatrias. Hacen mucho daño porque son topos ideológicos, dobles agentes de la política, del periodismo…
El Sr. Muñoz Molina y su „cónyuge“ no merecen ni ser criticados, su provincianismo e ignorancia son tales, que se hundirán sólitos, en el olvido eterno.
Flanagan, para empezar conceptos infantiles como izquierda y derecha están caducados y más relacionados con el orgullo personal, cual equipos de futbol.
Deberían de ser superados de una vez, si queremos salir de la inmundicia en la que nos encontramos en «Ejpaña».
En primer lugar aquí creo que se critican actitudes, independientemente del partido al que pertenezcan.
Remitiéndome a tus conceptos de «izquierda» y «derecha», creo que hay mucha «derecha» que se disfraza de «izquierda», y como cuela y siguen sacando millones de votos no tienen ninguna intención en dejar de hacerlo.
En resumen: Los pseudoprogres y los pepesunos son la misma mierda.
Muy acertado el artículo.
Espero que los que aún estáis en la parra os bajéis pronto de ella.
Si, también dicen que la ilustrtación está caducada y que los tiempos de la guillotina fueron superados. Pero continuamos con biblias, coranes y talmudes queriendo hacer política y eso es lo que hacemos.
Dígame entonces qué es lo *que hemos superado* si abandonamos el pensamiento mayoritario de izquierdas progresistas para doblegarnos ante la inmundicia que se cree la élite por la *Gracia de Dios*.
Nuestros enemigos son los talibanes y esos están todos en la banda heredera del franquismo, último reducto europeo de los señoriales bandoleros medievales.
Veo que no has entendido nada…
Solo digo que habría que superar ciertas etiquetas, y centrarnos en la justicia, nada mas.
Cosa que falta por estos lares.
En ningún momento dije abrazar ningún tipo de ideología capitalista oscura, sino mas bien que entre todos los españoles que detestamos el sistema deberíamos de abandonar etiquetas que dividen y centrarnos en abrir un proceso constituyente legítimo, regenerador y justo, para precisamente defendernos del capitalismo salvaje, entre otros.
Ahora volviendo a las etiquetas, naturalmente la derecha, (PP, PSOE, UPYD, etc) y esa rama de la izquierda que huele a naftalina, quedaran excluídos del mismo, los primeros porque no les combiene y los segundos porque son incapaces de mirar mas allá de su ombligo.
Pues yo creo que a estos progres aprovechados hay que darles caña, han vivido a todo trapo bajo la protección y tutela de ese partido que se dice socialista, sin cuestionarse nada, y ahora se apuntan al carro de la gente que realmente está luchando, y que ellos y el psoe olvidaron hace mucho tiempo, mientras vívían en su burbuja de lujo.
Salud y mucha IU
***La burbuja progresista, en el nº 4 de La Marea***
*******
¡Por favor, La Marea! No nos mareeis con críticas a las izquierdas que eso ya lo hacemos los de izquierdas.
Entramos aquí para machacar a los fascistas representados por el Pepé, agrupación pseudo politica procedente de la dictadura de Franco.
A los nuestros los criticamos en los congresos y les castigamos en las urnas.
Flanagan, no has entendido el mensaje: Beatriz Talegón, Toxo y Antonio Muñoz Molina no son de los nuestros, no hay congresos en donde criticarlos porque no pertenecen a ninguna organización de izquierda.
Y por favor, no pidas la autocensura…
Estoy con AAA. Estamos aquí para ser UNA MAREA, una lluvia a cántaros que limpie el aire y las calles. Lo mismo me da que me da lo mismo lo que haya que limpiar. Yo ya tengo cierta edad y vi como «cambiaba de chaqueta» ( entonces se decía así) mucha gente en los a?os ’70. ¡Qué no vuelva a pasarnos! ¡Qué sepamos cuál es la chaqueta que ha vestido cada quien!
Y vamos a construir una marea así: tú no que eres de derechas, 9 millones fuera, tú no que votaste al psoe que no es izquierda, 8 millones fuera, talegón fuera, toxo fuera, muñoz molina fuera, ese de allí que se mueve fuera… Va a ser una marea muy divertida, de las que hacen cosquillitas en el pie.