Política
Las relaciones entre los gobiernos de Cataluña e Israel, cada vez más estrechas
El ministro de Industria israelí pide a Cataluña que ofrezca incentivos fiscales para favorecer la instalación de empresas de su país. Artur Mas anunció que quería asociar Cataluña e Israel.
BARCELONA // Desde la época en que Jordi Pujol era el factótum de CiU, el Estado de Israel siempre ha sido un referente para la coalición nacionalista. Mientras que una parte significativa de la población catalana ha mostrado en numerosas ocasiones su rechazo a la ocupación de Palestina -sólo hay que recordar las movilizaciones contra la operación Plomo Fundido en Gaza en 2009-, la cúpula convergente se ha caracterizado históricamente por un apoyo acrítico al Estado judío, dejando en segundo término la situación de los palestinos y la persistencia de una ocupación que vulnera la legalidad internacional. Las relaciones entre los gobiernos de ambas entidades hace años que existen -en la era del tripartito también hubo viajes de representantes de la Generalitat a Israel-, pero desde que Artur Mas alcanzó la presidencia de la Generalitat se han acentuado, con la firma de convenios de colaboración empresarial incluidos.
El último ejemplo de hasta qué punto son estrechas las relaciones entre los gobiernos de Tel Aviv y el catalán lo ha dado el ministro de Industria, Comercio y Trabajo de Israel, Shalom Simhon, que en una entrevista a la ACN pidió al Ejecutivo de Mas que ofrezca incentivos fiscales para favorecer las inversiones de empresas israelíes en Cataluña y contribuir a «crear puestos de trabajo». Simhon, que es dirigente del partido Independencia -la formación fundada por el ex líder laborista y antiguo primer ministro Ehud Barak-, se ha mostrado convencido de que las relaciones económicas con Cataluña «crecerán». Nada hace pensar que la Generalitat no esté totalmente de acuerdo en favorecer las inversiones israelíes, que actualmente tienen como principal emblema a Iberpotash, filial de la multinacional hebrea ICL, que explota las minas de sal y potasa del Bages.
Mas aprovechó el viaje que en junio hizo a Massachusetts para anunciar que quería asociar a Cataluña con ese Estado norteamericano y «con Israel», a través de la formación de convenios para potenciar la economía del conocimiento y las TIC. «Israel es un ejemplo para el mundo, es un país pequeño, que lo fue pasando muy mal, que debe dedicar enormes esfuerzos a la supervivencia de su identidad y su cultura y que al mismo tiempo es pionero y punta de lanza de la industria tecnológica mundial «, afirmó Mas en Boston. Curiosamente, en el momento del viaje la Generalitat aún negociaba con el magnate Sheldon Adelson, judío y sionista declarado, el establecimiento de Eurovegas en Cataluña.
Convenio de ACC1Ó
Pocos meses antes, la Generalitat había confirmado la firma de un convenio de colaboración entre ACC1Ó, la agencia gubernamental dedicada a la internacionalización de las empresas catalanas, y la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo de Israel (MATIMOP), mediante el cual empresas de los dos países colaborarán en la puesta en marcha de proyectos conjuntos de Investigación y Desarrollo (I + D) e innovación industrial. El acuerdo no es gratuito, sino que ACC1Ó contempla una ayuda de hasta 250.000 euros para la parte catalana de cada proyecto. El acuerdo se produjo meses después de que la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, viajara a Tel Aviv, donde se reunió con el entonces viceprimer ministro, Silvan Shalom, y donde se pactó iniciar los trabajos que desembocarían en la firma del citado convenio entre ACC1Ó y MATIMOP.
Desde fuera del Govern pero desde dentro de CDC, también cabe destacar el viaje del secretario general de la formación, Oriol Pujol, a Israel, hecho en noviembre de 2011. Pujol, a punto de ser imputado por el caso ITV, se reunió, entre otros, con el presidente hebreo, Simon Peres, quien le confesó la voluntad de «colaborar con Cataluña en los ámbitos político, económico e institucional». Un año y medio después, sus deseos no hacen otra cosa que convertirse en realidad.
¡Quina vergonya!
Repugnante.
Si Moisés hubiera abierto las aguas del Ebro en Tortosa y estuviesen los sionistas ocupando Cataluña y perpetrando un genocidio, sí, ge no ci dio, con los habitantes de Cataluña desde hace más de 70 años, ¿cómo estarían estos venerables encorbatados?
Hay dos opciones: o serían colaboracionistas (por su naturaleza, la posibilidad más probable) o estarían presos en chabolas rodeados por un muro impune que sirve como venda del que no quiere ver.
Los distintos gobiernos de Catalunya siempre han estado muy próximos -en cuanto a relaciones institucionales- con Israel. Vale la pena tirar de archivo sobre distintas denuncias a este respecto:
Elecciones en Cataluña: El 25 de noviembre no votes sionista: contra la barbarie global ¡Boicot a Israel!
http://www.palestinalibre.org/articulo.php?a=42213
Las raices sionistas de un sector del nacionalismo catalán: el “catasionismo”
http://old.kaosenlared.net/noticia/raices-sionistas-sector-nacionalismo-catalan-catasionismo-2
Salud