Malala, de camino al Nobel de la Paz

MADRID // Malala Yousafzra está ya en el camino de lograr el Nobel de la Paz. La menor paquistaní de 15 años que recibió dos disparos por parte de los talibanes el pasado 9 de octubre se ha convertido en un símbolo de la lucha por la defensa de la educación de las niñas. Un movimiento mundial ha recogido 280,000 firmas  en Canadá -el país que más firmas ha aportado-, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia, India, Rusia y España para apoyar la lucha de la activista que fue tiroteada volviendo del colegio.

«Es una gran victoria. Estas firmas son una parte de un gran movimiento global de presión por la defensa de los derechos humanos. Ciudadanos, ONG y políticos hemos impulsado juntos una campaña de reconocimiento de la lucha por el respeto de las mujeres», declara Jessica Romero, de Ayuda en Acción. Para Romero, el caso de Malala ha servido para «visibilizar el trabajo de muchas mujeres y niñas que luchan diariamente por sus condiciones de vida en el mundo entero».

“Los talibanes han emitido un edicto que prohíbe ir a la escuela a todas las niñas”, explicaba la menor de 14 años en su blog personal, que mantuvo hasta enero de 2011 y en el que denunciaba la creciente presión de los extremistas islámicos en el valle del río Swat. Malala escribía su diario para cadena británica BBC bajo el seudónimo de Gul Makai. Los agresores, del movimiento Tehrik e Taliban de Pakistán, han amenazado con volver a atentar contra ella.

Según datos facilitados por la ONG, el 60% de los menores sin escolarizar del mundo son niñas. Además, «las niñas tienen mayor presión social para abandonar sus estudios en situación de pobreza». Los matrimonios precoces, los embarazos tempranos, la tradición y la imposición de tareas domésticas, entre otros factores, hacen que «el mero hecho de ser mujer repercuta negativamente en el acceso de las niñas a una educación de calidad».

Malala ha recibido la noticia de su candidatura en  Birmingham (Reino Unido) donde permanece refugiada y recibiendo atenciones médicas desde que fuese trasladada para ser operada en el Hospital Reina Isabel tras el atentado. Como explica Romero, «el mes pasado su padre  fue a Francia a recibir un premio en su nombre».

La niña que defendió el derecho de escolarización de las paquistaníes, y que en 2010 recibió el Premio Nacional de la Paz de su país, recibirá el apoyo español en forma de 80,000 firmas, que serán registradas en el Congreso de los Diputados para que éste haga formalmente la nominación ante el comité del Nobel de la Paz en Noruega.

Como explican desde Ayuda en Acción, el 1 de febrero se cierra el plazo para presentar las candidaturas y a partir de ahí se reunirá el Comité para realizar la primera criba: de todas las candidaturas tan solo serán seleccionadas entre 5 y 20. «No hay fecha exacta para saber si Malala es una de las elegidas», pero será a lo largo de los próximos dos meses cuando se haga público si continúa su camino a hacia el Nobel de la Paz.