Sociedad
De Guindos defiende que ninguna familia de “buena fe” se quede sin casa aunque hay que evitar “efectos perversos”
El ministro de Economía defiende en Bruselas los recortes y las ayudas para la banca.
BRUSELAS // El ministro de Economía, Luis De Guindos, afirmó hoy que ninguna familia de “buena fe” puede quedarse sin casa y señaló lo “imprescindible” que es que Gobierno y oposición se pongan de acuerdo en este asunto durante la reunión que va a tener lugar hoy en Madrid aunque hay que evitar los “efectos perversos”.
“En España tenemos un millón de viviendas vacías, en dicha situación, de acuerdo con el principal partido de la oposición, se tienen que tomar medidas para que ninguna familia de buena fe se quede sin techo por la crisis. Es imprescindible que ninguna familia de buena fe se quede sin casa”, afirmó hoy De Guindos en su comparecencia ante la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo en Bruselas.
A su vez, el ministro de Economía, a su entrada en la reunión del Eurogrupo que también tiene lugar hoy en Bruselas y en el que se hablará del porvenir de Grecia, añadió que “vivimos en un país en el cual hay una situación, desde el punto de vista social como consecuencia de los desahucios, compleja, difícil”. De Guindos se inclinó por que el Gobierno, la oposición y todos los actores sociales hagan un esfuerzo para que “las familias más vulnerables, las que tienen dificultades por culpa de la crisis no se encuentren en situaciones imposibles”. En la misma línea, también señaló que los bancos deben esforzarse en solucionar este problema porque “son los primeros interesados en no quedarse con la casa de nadie”.
Aunque De Guindos se apresuró a puntualizar que todas las medidas que se decidan durante el día de hoy deberán evitar “efectos perversos”.
Medidas contra el paro
De Guindos también rindió cuenta ante el Parlamento Europeo de todas las medidas que el Gobierno de Rajoy ha puesto en marcha para reducir el déficit público en los últimos meses, haciendo especial hincapié en la reforma laboral y la del sector financiero. Respecto a la primera, el responsable de la economía española sacó pecho de como España ha conseguido una “significativa moderación de los salarios, la caída de los costes laborales unitarios y, finalmente, la desaparición de la indexación de salarios en los contratos de trabajo”. Sobre el paro añadió que aunque los datos de la EPA no sean positivos se está viendo una estabilización en la destrucción de empleo en el sector privado aunque no ocurra lo mismo en el sector público.
Sobre jubilaciones, De Guindos no ha querido pronunciarse sobre si las actualizará con el coste de vida o no y se ha limitado a recordar que “el Gobierno de Mariano Rajoy ya las subió un 1 % este año”. Lo que sí precisó es la intención del Gobierno de que la edad de jubilación efectiva, 63 años, según el ministro, llegue a la real, 65 ahora, 67 años en los próximos años, cuando la reforma de las pensión del anterior gobierno socialista se haga completamente efectiva.
Varios eurodiputados del grupo de los verdes criticaron al ministro por su intervención que “parecía ir más destinada Bundestag que al Parlamento Europeo cuando hoy, para postres, no ha venido ningún parlamentario alemán a escucharle”. A su vez, la eurodiputada socialista griega, Anni Podimata, lamentó que durante la intervención inaugural del debate le pareció escuchar al ministro de Economía griego y no al de España.
De Guindos también dio cuenta de la situación del sistema financiero: “El 70 % del sistema financiero está sano y no necesita inyecciones de capital. El 90 % de las que lo necesitan está concentrado en las cuatro entidades ya nacionalizadas: Caixa Catalunya, Nova Caixa Galicia, Banco de Valencia y Bankia. Unas entidades que constituyen menos del 20 % del sistema financiero español”.
El ministro siguió explicando la “buena salud” del sistema financiero con el argumento de que las necesidades de capital, según las pruebas realizadas por consultoras independientes, son de 60.000 millones aunque las efectivas, tras medidas como la entrega de los activos tóxicos de las bancas nacionalizadas al banco malo, serán sólo de unos 40.000 millones, “entre un 3,5 % y un 4 % del valor del PIB de la economía española”.
Ayudas para la banca
Estas cifras son impotantes porque la ayuda recibida por España de sus socios europeos computará como deuda pública y provocará un mayor desvío del déficit. Todo lo contrario a lo esperado por el Gobierno español, que contaba con que el rescate de hasta 100.000 millones de euros dejaría de pesar sobre las cuentas públicas una vez que entrara en vigor la recapitalización directa a la banca desde el fondo de rescate europeo.
Sin embargo, Alemania se ha mostrado contraria a aplicar la recapitalización directa con retroactividad y en el último consejo europeo dejó claro quien mandaba en la mesa redonda europea.
De Guindos recordó, además, que en diciembre se cerrará la reforma financiera que empezó el pasado de mes de febrero con la puesta en marcha del banco malo, el 1 de diciembre, y que en los próximos meses llegará el primer tramo del rescate “blando”, o linea ventajosa de crédito, como vean, de unos 30.000 millones bajo el paraguas del nuevo programa de rescate europeo MEDE.