Opinión

“Agente, sirva usted al pueblo del que forma parte”

Carta abierta de un socio fundador de MásPúblico a un policía antidisturbios del 29-S

Señor policía antidisturbios, esta carta querría enviársela personalmente, pero no tengo el gusto de conocer su nombre, ni siquiera su número de placa, pues el 29-S, una vez más, no la portaba.

Me traje el día 30-S para mi ciudad periférica -no investiguen, el viaje me lo pague yo-, su autógrafo marcado en mi piel en forma de cuatro franjas del conocido color morado, que me tienen dolorido. Pero el dolor físico es más soportable que la gran desazón que me produce que un servidor del orden público, como es usted, pueda tratar así a un ciudadano que expresa pacíficamente su desacuerdo ante la acción de su gobierno.

Me pregunto: ¿por qué usted actúa con tanta “energía”? ¿Se sintió quizá amenazado? La concentración fue pacífica. Incluso, en un momento, algunos nos pusimos delante de usted, cuando unos pocos le tiraron algún objeto, porque, señor agente, usted es parte de este pueblo, nuestra protesta no es contra usted. Y como persona que es, merece consideración y respeto. Ni usted ni nadie debe ser objeto de ningún trato violento por una discrepancia en las ideas.

¿Piensa que los que protestamos somos unos gandules que no tenemos nada mejor que hacer? Es el archisabido recurso que se ha usado durante toda la historia, para descargar la mala conciencia, “son infrahumanos”, así se pudo esclavizar a los negros, exterminar a los judíos, empobrecer y parasitar a los ciudadanos de los países PIGS…

Se equivoca, no soy un vago, tengo 54 años y desde niño he trabajado siempre con gusto. Cumplí mis 14 años con mi primer trabajo remunerado. Y como el chico salió aplicado estudié y todos los veranos trabajé. Me hice profesional liberal, tengo una empresa con cuatro trabajadores si me incluyo. Y trabajo, trabajo mucho, más de lo aconsejable, según la OIT, y lo razonable, pero disfruto con ello.

¿Somos unos resentidos, envidiosos? Pues no, no soy un resentido, no tengo envidia de nadie. Se preguntará entonces, ¿por qué protesto? Mi protesta no es por mí, es por mi país, por mis conciudadanos, entre los que lo incluyo. Porque el mayor bien que les podemos dar a nuestros descendientes, es una sociedad justa, solidaria, que permita que sus ciudadanos puedan desarrollar al máximo sus capacidades y que les mantenga al abrigo de zozobras como la enfermedad o los cataclismos naturales.

Quizás piense que debe mantener el orden, cumpliendo lo que le mandan sus superiores, que obedecen a su vez al gobierno legitimo democráticamente elegido. El partido que ha formado gobierno en su campaña electoral prometió como sus cuatro grandes prioridades mantener la sanidad, educación, los servicios sociales y la lucha contra el paro.

Los tres primeros han sufrido importantes recortes y el paro todos sabemos cómo va.
La principal partida del presupuesto del 2013, 38.500 millones de euros son para pagar los intereses de la deuda contraída con los especuladores. ¿Se ha parado a pensar que con ellos se crearían 2 millones de empleos de 1.000 euros mensuales, más su aportación a la Seguridad Social? Si a esa cantidad sumamos los 28.000 millones que se han pagado en 2012 se podrían haber creado casi un millón y medio de empleos. Estos empleos más el incremento de actividad económica que hubieran llevado aparejada habrían solucionado totalmente el paro en este país.

¿Es pues mantener el orden obedecer al embustero, qué coge el producto de millones de horas de trabajo, vía impuestos, para entregárselos no al desfavorecido, a la sociedad, sino como cruel sacrificio humano al dios de la especulación, de la avaricia?

En fin, señor agente, no fuimos muy felices en nuestro encuentro el 29-S, yo apaleado, y usted cuando lo miraba a la cara vi que tampoco, ni siquiera tenía cara de rabia; su cara era de preocupación, y es que supongo, estas dudas que le expongo le deben asaltar.

¡Qué lástima para usted! Realizar un trabajo y no tener al concluirlo bien el gusto que dan las tareas bien hechas, y es que lo están usando los hijos de la avaricia para mantener sus privilegios.

Señor agente, nos seguiremos viendo, me temo. Porque no temo a sus moratones, a esta altura de mi vida, a lo que más temo es a no estar a la altura de lo que me dicta mi ética.

Si me lo permite, le pediría para terminar que se convierta en agente del orden del pueblo, del que forma parte, y contribuya a erradicar de esta, nuestra sociedad, los abusos, la corrupción, el despotismo, la injusticia. Una sociedad que nos permita ser en definitiva, más felices.

Afectuosamente,
Ángel Borruel

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Comentarios
  1. Pedir explicaciones o esperar el mínimo razonamiento de un policía es perder el tiempo. Su trabajo consiste en reprimir a cualquier precio y obedecer órdenes sin cuestionarlas. Por si eso fuera poco, su capacidad intelectual tampoco es que ayude demasiado.

  2. No os canséis pidiendo «peras a un alcornoque», yo probé sus vergajos en los 70´s y vi sus sádicas caras haciendo uso de ellos, estando inerme en el suelo, a los pies de los encabritados caballos. No mas encabritados que sus exacerbados y sádicos jinetes Ahora a mis 60 y pico me cuido mucho de no arrimarme a los mismos «alcornoques» con distinto uniforme (sálvese quien pueda), en las manifestaciones, pero gracias a las fotos (que por cierto «democráticamente» quieren prohibir estos gobernantes tan «demócratas de toda la vida») de los medios podemos ver con total nitidez las «caritas de gusto» de los susodichos ( a algunos, los tendrán que llevar al psiquiatra, para que se la quite…como a la monjita del chiste), y la manera de provocar y arremeter contra pacíficos manifestantes, que son la inmensa mayoría. ¿Es que no saben distinguir entre violentos y pacíficos ciudadanos que hacen uso de su derecho a manifestarse?. Pues entonces son además incompetentes «mononeuronales».

  3. respuesta al señor policia que no se identifica ni siquiera en su respuesta.
    Solo una presicion : ¿usted ha visto los videos que hay en internet?…no,no se mienta a si mismo,muchos de ustedes golpean porque parece que les da placer………y por si no lo sabe todos podemos y debemos desobedecer ORDENES INJUSTAS.
    P.D: Si usted con el sueldo de policia no puede pagarse el cafe,imagine a un parado… y sobre todo a un parado que no cobra ni un euro del estado.Asi que , si quiere cafe , se lo paga usted,para hablar no hay que tomar cafe,y para justificar como hace usted la brutalidad policial mucho menos. ( ¿y cuando dice que acuden a las manifestaciones es como INFILTRADOS ? ).

    Un ciudadano.

  4. Amigo Ángel Borruel, me encantaría poder explicarle la razón de todas esas cosas que no llega a entender. Soy policía y, aunque no estuve en el 29S, le aseguro que de haberlo estado lo hubiera hecho igual que mis compañeros. Usted lo ve de una manera, pero es de otra. Dice que fue manifestación pacífica, pero también que algunos pocos tiraron objetos a la policía. Reflexione acerca de ello y, si está ligeramente abierto a otras opciones, verá que es una contradicción. También le expongo que colocarme el número en el pecho es materialmente imposible, a no ser que yo mismo me fabrique un artilugio casero que me permita hacerlo, ya que el estado no me ha proporcionado los medios para colgarlo en este tipo de uniforme. He visto imágenes con círculos rojos alrededor de un parche de velcro de nuestro chaleco. Le informo que eso es para poner la categoría, y ahí es imposible colgar el número. En cuanto a saber qué se pide en las manifestaciones, lo sabemos muy bien, y mucho de nosotros acudimos a ellas cuando no nos toca trabajar, ya que estamos tan afectados (y algunos más) que ustedes. A este respecto añado que algunos trabajamos gratuitamente en plataformas de lucha contra el sistema político actual, así que sé de lo que hablo.
    De la misma manera le digo que no me importaría tomar un café con usted y explicarle más a fondo el trasfondo de mi trabajo, si de verdad le interesa más saberlo que criticar con los ojos vendados (al café invita usted, yo hace meses que no me lo puedo permitir).
    Atentamente,
    Un policía.

    • Estimado señor agente no entro en contradicción al decir que la manifestación fue pacífica el 29-S, pues así fue. Cuando digo que hubo un momento donde algunos tiraron unos objetos contra ustedes, fue durante unos segundos y muy pocos objetos. De hecho ningún agente fue lastimado.
      Eso ocurrió cuando todos ustedes sin ninguna motivación por parte de los manifestantes ya se bajaron las viseras de los cascos, era evidente que se preparaban “para la carga” o sin eufemismos para dar una paliza a los manifestantes.
      Y la paliza llegó, sin mediar ningún motivo por parte de los manifestantes. O sea cuando recibieron la orden de sus superiores, Cifuentes, ministro del interior. ..Ejecutores del control del Pueblo, para que los que viven de él sigan haciéndolo. Ellos fueron los provocadores de los disturbios.
      ¿Por qué yo nunca levantaré mi mano, ni mi voz de forma violenta contra usted? Por dos motivos.
      El primero, ¿se ha parado a pensar que en las confrontaciones, guerras…, las víctimas siempre son los humildes, sea cual sea el bando? Usted pertenece a la fracción humilde del Pueblo, como yo, y como la mayoría. Ya vale de incrementar siempre el sufrimiento de los mismos.
      Y el segundo, yo aspiro a una sociedad más justa, solidaria, digna, dónde toda persona tenga un trato humano. Lo que deseo para mí también lo deseo para todos mis conciudadanos de los que usted forma parte.
      Usted no es mi enemigo. Usted solo es víctima de una confusión, confunde el orden con cumplir la orden de los poderosos, de los hijos de la avaricia. Para los que usted tampoco cuenta, lo usan, pero usted no es nadie para ellos.
      Si un día, ojala próximo, se decide a dejar caer su porra y casco y se mezcla con los que pedimos una sociedad más justa, ya verá que alegría, que chocar de manos. Se habrá reconciliado con el Pueblo, su Pueblo.
      Afectuosamente, Ángel Borruel

  5. Por desgracia todos somos esclavos de nuestro estómago, pedirle esto a un agente entrenado para aplastar manifestantes, es como pedirle a los de hacienda que no nos inspeccionen en período de crisis o que la guardia civil no nos multe dado que nos han subido el IVA. La conciencia de alguien así no creo que sea la misma que la del manifestante, pero tampoco se lo puede permitir.
    Por tanto la conciencia que debe cambiar es la de los que los envían a pegar con dureza, esos solo «cambian» con los votos, y por desgracia los votos son para un largo y agónico periodo.

  6. Uno de los trabajos que he realizado durante mi vida ha sido de vigilante de seguridad, aún tengo el título por ahí. Y uno de los principios que te enseñan en la academia es que ante una orden que se salga de la ley, no tiene por qué ser cumplida. Los agentes del orden se supeditan a la ley antes que a su superior. Sí, dada la coyuntura política, el agente puede perder su trabajo, pero antes es eso que perder la satisfacción por un trabajo bien hecho, en este caso «defender la ley y el orden». Sí Ángel, las fuerzas de seguridad también son pueblo, pero parece que hasta que no se den cuenta, seguiremos llevando garrotazos, posiblemente hasta que muchos de sus agentes no aprendan a solucionar sus conflictos mentales, esos que les impiden distinguir entre quienes en estos momentos se están saltando toda ley y aquellos que, afectados, intentamos protegerla . Un abrazo

  7. Las fuerzas del orden en la ciudad de aragonesa donde resido están pidiendo «más colaboración ciudadana». Dado el carácter represivo y prepotente que se respira en la ciudad desde que está regida por los herederos ideológicos de la dictadura, ¿habrá alguien tan necio que se la preste para que nos zurren más?

  8. Demando que cuando se mencione al Pueblo Soberano se escriba con mayúscula, porque es el propietario de la Nación mientras que el Rey y el Gobierno no son otra cosa que delegados de ese Pueblo.

    También que se deje de nombrar al Pueblo como *el pueblo llano*, porque en Democracia no hay nada mas elevado que el Pueblo.

  9. Muy respetuosa y razonada la carta.

    Para cierto porcentaje de agentes, es como dice el refran,»machacar en hierro frio, tiempo perdio».

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