Sociedad
Juicio contra un discapacitado detenido en una marcha del 15-M
Un subinspector de los Mossos lleva a los tribunales a un hombre en silla de ruedas al que detuvo cuando trataba de salir de la manifestación porque tenía que ir a dar una pastilla a su mujer, enferma de cáncer, denuncia el detenido.
BARCELONA // El juzgado de instrucción número 6 de Barcelona celebró ayer el juicio contra José Miguel Esteban, un hombre en silla de ruedas que fue detenido por resistencia a la autoridad y desobediencia el pasado abril. Los hechos se produjeron en los alrededores de la cárcel Modelo durante la marcha que protagonizaron un centenar de indignados para reclamar la liberación de los detenidos en la huelga general.
José Miguel tiene una discapacidad física superior al 80%, lo que le obliga a ir en silla de ruedas. Ayer recordó que el día de los hechos, intentó “salir de la manifestación porque tenía que ir a casa a darle la pastilla a mi mujer”, enferma de un cáncer terminal. “Al pasar por el cordón policial el subinspector me empujó y cuando volví a pasar me detuvo y me metió de muy malas maneras en el furgón, donde quedé tirado en el suelo. Dejaron la silla abandonada”.
Así lo relató durante la vista: “Busqué un punto por donde poder subirme a la acera, y escogí subir a la acera donde estaba la policía porque quedaba la mitad libre, no había gente y podía ir más rápido”. “De pronto noté que me empujaban hacia el bordillo. Oí que otro policía le decía ‘no lo hagas’, y me paró a un palmo. Cuando vi que se olvidaban de mí volví a pasar y ya me empujó hacia la pared”. “En ningún momento me permitió decirle que solo quería salir de la manifestación para llegar a tiempo a casa”, aseguró José Miguel.
El subinspector Jordi Arasa, que realizó la detención y es quien llevó a José Miguel a juicio, sostuvo que le repitió reiteradamente que saliese de la línea del cordón policial, que éste hizo caso omiso y que trató de frenar al furgón policial, incitando a los manifestantes a traspasar el cordón, un hecho que José Miguel niega. También mantuvo que se resistió a la detención con el brazo. Sin embargo, un médico forense sostuvo ayer que José Miguel puede mover el brazo, “pero con muy poca fuerza debido a la poliomelitis que sufre”.
Cerca de 50 amigos, vecinos y familiares se acercaron a los juzgados para mostrar su apoyo a José Miguel. Entre ellos Manuel, que también precisa de una silla de ruedas para desplazarse, y que junto a otros manifestantes le llevaron la silla que había quedado abandonada en la calle. “Suerte que aún tenía el móvil y nos pudo decir donde lo habían llevado”, valoró.
Arasa fue uno de los antidisturbios imputados como presunto autor de decenas de lesiones a los indignados durante el desalojo de la plaza de Cataluña. Está previsto que otro juzgado instruya un proceso contra él para esclarecer si cometió una detención desproporcionada, después de que José Miguel lo haya denunciado por maltratos y vejaciones.
Hay que movilizarse y no permitir que la policia campe a sus anchas y pueda golpear a un ciudadano por que se manifiesta(en este caso es la policia autónomica que tanto se pedia, donde hay autenticos salvajes).