Sociedad
Un interno del CIE de Zona Franca en huelga de hambre pide que reabran su caso
Después de más de un mes en el Centro de Internamiento de Extranjeros de la Zona Franca (Barcelona), Hicham el Moussaoui, marroquí de 28 años, ha iniciado una protesta para tratar de frenar su orden de expulsión.
BARCELONA // Después de más de un mes en el Centro de Internamiento de Extranjeros de la Zona Franca (Barcelona), un joven marroquí de 28 años, Hicham el Moussaoui, ha iniciado una huelga de hambre. Lo hace para pedir que se reabra su caso y así tratar de frenar la orden de expulsión que pesa sobre él.
Hicham fue detenido la madrugada del 29 de marzo de 2010 en la Rambla de Barcelona. Asegura que durante aquella noche fue agredido en comisaría por los Mossos d’Esquadra. Aún detenido, al mediodía siguiente fue trasladado a un ambulatorio cercano y el parte médico reconoce un enrojecimiento de la cara del detenido por bofetadas que, según el Moussaoui, le propinaron los agentes que le detuvieron. Mientras tanto, la policía catalana le acusaba de un delito contra la sanidad pública y aquél mismo día se iniciaron los trámites para dictar su orden de expulsión del país, aunque esto no lo sabría hasta dos años más tarde.
Un día después de la detención, ya en libertad, volvió a ir al médico, en este caso al hospital de Sant Pau y el médico que le atendió diagnosticó magulladuras en el cuello y una ligera disminución de la agudeza visual del ojo derecho que serían derivadas de la supuesta agresión policial. Hicham prefirió no denunciar y olvidarse del caso, confiado que podría seguir su vida sin ningún problema.
De eso hace más de dos años. Desde su llegada a Catalunya, en el 2008, ha trabajado en el sector de la construcción y la hostelería, lo que le ha permitido aprender un poco de inglés. Al mismo tiempo ha hecho algunos cursos de catalán y es un habitual de las bibliotecas de Terrassa, la ciudad donde vive. Sus amigos lo definen como un “intelectual y apasionado del debate y la cultura”.
Ya había prácticamente olvidado el incidente con los Mossos d’Esquadra que no se atrevió a denunciar cuando la Policía Nacional irrumpió en un locutorio cercano a su casa, en el barrio de Ca n’Anglada, el mes pasado. Mientras hablaba por Facebook fue detenido porque constaba contra él una orden de expulsión de la que no tenía constancia. Lo detuvieron y desde entonces lleva más de 40 días internado en el CIE de la Zona Franca.
La familia de Hicham lleva desde el primer día moviendo cielo y tierra para ayudarle a salir del centro pero el juzgado contencioso Administrativo número 13 de Barcelona denegó la suspensión de la orden de expulsión. Al ver todas las vías de futuro cerradas, Hicham decidió iniciar una huelga de hambre. Así lleva desde el pasado lunes 16 de julio, hace ya dos semanas, y no piensa abandonarla hasta que se reabra su caso para poder defenderse ante la justicia. Del juicio que dictó su orden de expulsión no tuvo constancia en su momento y a su favor arguye un contrato de trabajo y el arraigo familiar en proceso.
Su hermana, nacionalizada española, vive en el País Vasco y se ha trasladado hasta Barcelona para dar apoyo a Hicham. «Es una persona dura, no va a renunciar, lleva seis años trabajando y aquí tiene su vida”, asegura Mohamed, un amigo suyo que creció con él al norte de Marruecos y que reencontró años después en Terrassa. Los que han podido hablar con él explican que, de momento, mantiene un buen estado de salud y, sobre todo, conserva la esperanza en que la justicia se ponga de su lado.
Un interno del CIE de Zona Franca en huelga de hambre pide que reabran su caso | La Marea, me ha parecido muy ameno, me hubiera gustado que fuese más extenso pero ya saeis si lo bueno es breve es dos veces bueno. Enhorabuena por vuestra web. Besotes.
lo de los cies no tiene nombre… vergonzoso…