La reconstrucción de Can Vies comienza con la retirada de cuarenta toneladas de escombros

JESÚS RODRÍGUEZ // Manos, picos, palas y mucha ilusión por volver a levantar Can Vies. Así comenzó la jornada de rehabilitación del edificio que ha tenido su punto de partida en Can Batlló, donde más de 300 personas equipadas con todo tipo de material de obra han hecho un pasacalle hasta la calle Jocs Florals. Tres agentes de seguridad de TMB que llevaban perros con bozal han abandonado la valla de perímetro del inmueble, así como también lo han hecho dos agentes de la Guardia Urbana, en el momento de la llegada de la comitiva reconstructiva. Un chico equipado con un megáfono ha explicado cuáles serían los protocolos de actuación: «Primero entrará un equipo de arquitectos y aparejadores para estudiar la situación del edificio, después comenzamos a retirar escombros y proteger las dependencias que puedan ser rehabilitadas». Todo se ha hecho con un alto nivel organizativo, donde todo el mundo iba equipado con casco amarillo y guantes.

Cadenas humanas han trasladado los escombros hasta el exterior del solar, donde se ha separado y limpiado todos aquellos ladrillos que se podían reciclar. El resto ha quedado amontonado en el lateral del edificio, a modo de terraplén. La grúa ha quedado convertida en una gran jardinera de flores y plantas. Mientras tanto, tres escaladores equipados con sierras radiales han cortado las estructuras dañadas que podían desprenderse.

La frenética actividad, que a mediodía sumaba más de un millar de personas, se ha redondeado con una cadena humana -de más de 500 personas- que ha transportado escombros desde Can Vies hasta la puerta de la sede del Distrito de Sants. Han depositado cientos de trozos de ladrillo, al tiempo que han colgado dos pancartas y varios carteles en las rejas y la fachada. Los agentes de la Guardia Urbana lo miraban desde la distancia. Muchos de los participantes en la Feria de Entidades, que paralelamente se hacía en la Carretera de Sants, han aplaudido la iniciativa. Una vez finalizada la protesta han vuelto frente al edificio en reconstrucción, donde un mural de colores hecho por niños y una comida popular han sido las actividades lúdicas que han completado la jornada. Hacia las cinco de la tarde, y cuando empezaba a llover, se habían retirado hasta dos metros de escombros de algunas de las dependencias, con un volumen total de más de cuarenta toneladas, que son fruto de la actuación ordenada por el Ayuntamiento de Barcelona el pasado martes .

Los trabajos de rehabilitación también han consistido en tapar todos los agujeros en techos y suelos, así como en minimizar cualquier riesgo de desprendimiento. En lo alto del tejado vuelve a ondear un banderín de Can Vies.

[Artículo publicado originalmente en La Directa]