Rouco Varela ve señales de recuperación económica y apela a la unidad de España

Esta semana, la Conferencia Episcopal (CEE) celebra su asamblea en la que se elegirán a los nuevos representantes de la iglesia católica en España. La jornada inaugural ha corrido a cargo del arzobispo de Madrid, Rouco Varela, quien finaliza mandato en marzo de 2014, pero al que el papa Francisco podría sustituir en el cargo antes de que acabe el año. Su discurso ha tenido un marcado carácter político, haciendo un repaso a la situación del país sin esquivar ninguno de los grandes temas, tengan o no que ver con la fe.

En sus palabras, ha asegurado que en el país ya “se atisban algunas señales del comienzo de la recuperación” de la situación económica que exigirá un esfuerzo continuado y generoso. Así, ha mostrado la “necesidad” de reducir los datos del paro, lo que debe suponer “una conversión moral de todos los agentes sociales”.

Pero además, Rouco Varela, ha mostrado su “preocupación” porque “la unión fraterna entre todos los ciudadanos de las distintas comunidades y territorios de España, con muchos siglos de historia común, pudiera llegar a romperse”. “La unidad de la nación española es una parte principal del bien común de nuestra sociedad que ha de ser tratada con responsabilidad moral”, ha concluido.

Menos preocupado se ha mostrado por la relación entre Iglesia y Estado ya que, a su juicio, “están suficientemente bien regulada por los Acuerdos entre la Santa Sede y el Estado Español firmados en 1979”.

También tuvo un recuerdo para el presente y futuro “del matrimonio y la familia”, que a su juicio continúa con “problemas muy graves” debido a “las leyes injustas”. En este sentido, ha expresado que “el egoísmo que triunfa en la vida matrimonial y familiar de España, debe ser combatido también en el ámbito de la educación en general”. Y pidió “con todo respecto e incansable insistencia” a los políticos, “un giro positivo de la legislación y de la política sobre el matrimonio y la familia”.

Finalmente, Rouco Varela destacó como uno de los grandes hechos del año 2013 la beatificación de 522 mártires de la Guerra Civil española que “se vieron dramáticamente inmersos en la noche del ateísmo del siglo XX”. Asimismo, criticó “la cultura de la muerte que ensombrece los grandes logros del mundo moderno”.