Otros
La Generalitat adultera los datos de las listas de espera para avalar los recortes
Las cifras de 2011 que ha presentado recientemente el conseller Boi Ruiz no se corresponden con la Memoria del CatSalut. Las esperas para operaciones quirúrgicas habrían subido un 1% y no bajado un 12%, como anunció el conseller.
BARCELONA// El pasado 6 de febrero, el conseller de Salut de la Generalitat de Cataluña, Boi Ruiz, afirmó durante su comparecencia parlamentaria que el tiempo medio de espera de los pacientes para operaciones quirúrgicas se redujo alrededor de un 12% en 2012. Los datos que manejaba el conseller, y que se pueden consultar en la página web de la Generalitat, señalan reducciones en el tiempo de espera que oscilan entre un 2,2% en las operaciones de prótesis de rodilla y un 31,4% en las histerectomías (extirpación del útero). Sin embargo, los datos de 2011 sobre los que se basa la comparativa no se corresponden con los anunciados por Salut aquel año.
Así, en la Memoria oficial del CatSalut del año 2011 se refleja, por ejemplo, que el tiempo medio de espera para operarse de varices fue de 4,27 meses; para circuncisiones, de 4,47 meses; y para quistes, de 3,76 meses. Sin embargo, los datos de 2011 que ha ofrecido este mes el conseller no tienen nada que ver. Señalan un tiempo medio de espera de 5,07 meses para las primeras, 6,99 para las segundas, y 4,52 para las terceras. De este modo, al compararlas con 2012 da la impresión de que se haya producido una caída generalizada de los tiempos medios de espera.
De hecho, si los datos ofrecidos por Boi Ruiz fueran los correctos, en 2011 se habría superado el tiempo máximo de espera, fijado en seis meses, en cinco de las 14 operaciones que tienen garantizado este periodo máximo. La comparativa con los datos ofrecidos en 2011 por la Generalitat arroja un incremento medio del 1%, y en operaciones como las colecistectomías (extirpación de la vesícula biliar) el aumento del tiempo de espera llegaría hasta el 28%. En nueve de los 14 tipos de operaciones habría aumentado el tiempo de espera. La Marea ha tratado sin éxito de recabar la versión del Departament de Salut sobre este baile de cifras.
El conseller, que en una entrevista concedida a TV3 unos días antes de su comparecencia había vinculado la reducción de las listas de espera a la implantación del euro por receta, anunció la presunta reducción celebrando que se había superado el 2% que se había marcado el Departamento como objetivo. Tras la comparecencia parlamentaria, varios medios anunciaron que, pese a los recortes, Salut había logrado reducir los plazos para operarse. Lo cierto es que la Conselleria necesitaba ofrecer datos positivos después de que, en el primer año de gobierno de CiU y los sucesivos recortes en los presupuestos destinados a la Sanidad, las listas de espera hubieran aumentado en un 42%.
La Plataforma de Afectados por los Recortes Sanitarios (PARS) ha criticado la “técnica manipuladora” del departamento para avalar su gestión. Además, ha denunciado que han desaparecido de la web de la Generalitat los informes semestrales sobre listas y tiempos de espera publicados hasta ahora (diciembre de 2010, junio de 2011, diciembre de 2011 y junio de 2012), quedando únicamente los datos de diciembre del año pasado. “Quizás no quieren dejar rastro de las consecuencias de sus decisiones”, aventura la PARS.
Según los cálculos de la plataforma, en junio del pasado año “al menos 18.000 pacientes” no habrían sido operados dentro del plazo de seis meses que señala la normativa, fijada en el Decreto 354/2002 de la Generalitat.
Mi caso, aunque NO grave, podría explicar las prácticas de la sanidad catalana para maquillar los datos de las listas de espera:
En mayo de 2012, el dentista de mi Centro de Salud, me derivó al Hospital de Mataró para la extracción de las muelas del juicio. Según el procedimiento administrativo, el Centro de Salud envía la petición al Hospital, y el Hospital asigna la visita, notificando por carta al usuario en un plazo máximo de un mes. Despúes de meses sin recibir la carta, contacté con el hospital y me dijeron ricamente que el volante se había perdido, que tenía que volver a pedirlo. En octubre, tramité otra vez el volante, sin respuesta, hasta que en enero volví a contactar con el Hospital. La respuesta fue clarificadora: no es que se hubiera perdido el volante, si no que, debido a la larga lista de espera, el hospital apila las peticiones y no las cursa hasta nueva orden. Por lo tanto, estoy en un limbo. No formo parte de las estadísticas de listas de espera para una operación, simplemente porqué no estoy inscrito a ella. Con esta lógica, las listas bajan, porque no crecen. En breve hará un año de mi petición… a este paso, y confiando que la petición no vuelva a ‘perderse’ quizás entre en lista en 2015 para operarme en 2020.
Así es, ha subido el tiempo de espera excepto para quienes tienen enchufe.
[…] En un momento en que la ciudadanía está sufriendo un aumento en las listas de espera, incluido un falseamiento de las cifras, el Sr. Gérvas (lo siento, me cuesta ponerle Dr.) ataca a la más exitosa prevención, el […]
Políticos = a mentirosos.
Por supuesto que hay alguna excepción
Todos los gobiernos maquillan o buscan excusas terribles para amputar nuestros derechos porque saben a la perfección que lo que están planeando es pura codicia contra décadas de lucha y esfuerzo de millones de individuos.
http://casaquerida.com/2013/02/25/que-no-nos-den-equino-por-bovino/